El Sevilla se acerca a los octavos y se desquita de la goleada en Moscú

El Sevilla ganó (2-1) al Spartak y dio un gran paso para estar en octavos de la Liga de Campeones, en un partido sin brillo y con una segunda mitad más disputada al ofrecer los rusos una versión más ofensiva, con lo que el equipo andaluz se desquitó del 5-1 encajado hace dos semanas en Moscú. Con intensidad, el control total del medio campo por la fuerza de N’Zonzi y Pizarro, y buenas subidas por las bandas, sobre todo de Nolito y Escudero por la izquierda, el Sevilla superó por completo al agazapado equipo ruso en los primeros 25 minutos. El dominio del Sevilla se materializó en el marcador cuando parecía que empezaba a atenuarse su empuje, a la media hora de juego, cuando Lenglet cabeceó un córner de Banega y logró el 1-0. El Spartak se espabiló y avisó de su peligro en dos ocasiones antes del descanso.

En la reanudación, el equipo moscovita salió con la consigna de estirar sus líneas y el reto de variar el guión del partido e inquietar al rival mucho más cerca de su área rival. Mientras, los sevillistas se esforzaron en mantener la seguridad y la concentración atrás. Pero las llegadas más peligrosas fueron del Sevilla. Nolito lo intentó, pero su tiro cruzado salió rozando el poste derecho de Selijov, si bien el que no perdonó fue Banega, que hizo el 2-0 con un zurdazo desde la frontal del área que se coló ajustado y a media altura en la meta rusa. El Spartak se fue arriba, pero sin éxito ni claridad, y Ben Yedder pudo ampliar la renta local. Esto espoleó a los rusos, que acortaron distancias en el 78’ por medio de Zé Luis, lo que dio emoción a los últimos minutos al volcarse en ataque el Spartak, aunque el Sevilla aseguró un triunfo vital.