El voleibol busca árbitros

La Federación Catalana de Voleibol puso ayer en marcha un curso de formación de árbitros ante la urgente necesidad de cubrir las carencias del voleibol leridano, que no puede cubrir todos los partidos que se juegan los fines de semana. “El volei ha crecido mucho en Lleida y no hay suficientes árbitros”, explica Quim Ventura, responsable de la comisión técnica arbitral de la FCV. “En estos momentos en Lleida solo hay tres árbitros, por lo que hay semanas que se quedan cuatro o cinco partidos por cubrir y en muchas semanas, son dos o tres en los que no podemos designar colegiados”.

Ante esta situación, son los propios clubes los que se encargan de que un voluntario arbitre el partido. “La Federación nos avisa cada semana de los partidos que se quedan sin cubrir y nosotros buscamos a un jugador o un entrenador del club, que se encargue de arbitrar”, explica Vanesa Ortega, exárbitro de categoría nacional y unas de las responsables del Balàfia Volei. “Cuando pasa esto, le comunicamos al equipo rival quién será la persona que arbitrará el partido, pero pueden negarse a jugar y entonces hay que aplazar el encuentro”, añade.

En las categorías en las que arbitrarán los aspirantes se paga entre 25 y 30 euros por cada partido

Ortega explica que “la falta de árbitros se ha acentuado en los últimos años y lo de esta temporada ya es extremo. Por eso, desde los clubes, hemos hecho una campaña de captación de aspirantes, que son los que van a hacer el cursillo”, al que se han apuntado 58 jóvenes.

“¿Por qué faltan árbitros?, primero porque ser árbitro no es especialmente atractivo”, reconoce Ventura. Los aspirantes harán un curso de cuatro horas teóricas, después harán prácticas el sábado y deben pitan 20 partidos a lo largo de la temporada para adquirir la titulación Territorial B.

“Para que no estén solos, en los partidos les acompañaremos Montse Nadal y yo misma, que también somos árbitros, para que se sientan arropados”, añade Ortega. “También hemos pedido paciencia a los entrenadores, que no les presionen, porque no servirá de nada si no se quedan como colegiados”.