FÚTBOL FORMACIÓN
El fútbol como escuela
Los equipos del colegio Terraferma, junto a la firma LSA, han iniciado un proyecto pionero que trabaja la técnica y los valores || Camisetas con lemas inscritos en el dorso y capitanías rotatorias
Niños del Terraferma LSA muestran sus camisetas con valores inscritos.
Corren tras la pelota, celebran un gol, driblan a un contrario y aprenden al mismo tiempo valores que luego les ayudarán en su vida. Así lo entienden en el colegio Terraferma, donde a través de la fusión entre la Escola Esportiva Terraferma y la firma Learning Soccer Academy que gestiona fútbol formativo han puesto en marcha esta temporada un programa pionero que pretende demostrar que el fútbol puede ser una excelente escuela de valores de presente y futuro para los niños.
La Escola de Futbol Terraferma LSA, que coordinan Enric Barri y Jordi Cortés, ha creado un modelo formativo denominado “Bubbles”(burbujas) que implica a familias, entrenadores y los propios jugadores. Cada niño lleva serigrafiado en la parte dorsal de su camiseta, encima del número, un determinado valor humano como ‘fair play’, respeto, educación, humildad y así hasta doce virtudes o cualidades. Además, en cada entrenamiento se designa de forma aleatoria un capitán que deberá no solo cumplir el compendio de valores que trabaja el equipo sino servir de referente a sus compañeros. Finalmente, el día de partido cuando salen al campo los capitanes de los equipos, hasta categoría alevín, gritan “¡1, 2, 3 fútbol! invitando a unirse al conjunto rival, con el que conversan y reflexionan tras el juego, y al propio árbitro. “Los niños están en un periodo de formación clave en el que absorben todo lo que pasa a su alrededor”, señala Enric Barri, que además de entrenador de fútbol es psicopedagogo. Los niños quieren ser los próximos Messi, Cristiano o Iniesta. “Ven que tienen un trabajo con el que se divierten y que, además, están muy bien pagados y gozan de reconocimiento social”, dice Barri. Así que imitan su comportamiento, sus valores como la lucha, pero también las triquiñuelas para engañar al árbitro o gestos violentos. “No se les puede transmitir que vale ganar a cualquier precio. El fútbol también puede transmitir valores negativos y es importante evitarlo”, señala Enric Barri.
“Nuestro modelo de club se basa en un modelo deportivo (Eureka) y uno formativo (Bubbles)”, subraya Barri, que junto a Fede y Fran Bessone –los tres pilares de LSA– cuentan con la colaboración de entrenadores leridanos como Félix Giménez, Pere Sánchez, Josep Maria Espasa, Enric Ribelles, Jordi Calderó y Josep Roca, dentro del proyecto de tecnificación Top Player.
Los padres, lejos de ser ‘hooligans’, se implican activamente en el club El Terraferma LSA compite en el fútbol federado en cinco categorías (infantil, alevín, benjamín, prebenjamín y babys) y dentro de su proyecto “Som Escola” implica también en el proceso formativo a las familias.
