El Actel espera recuperar los 2.200 abonados

Con las fiestas de Navidad a la vuelta de la esquina, el Força Lleida ha lanzado la campaña de abonados para la segunda vuelta de la LEB Oro con descuentos de alrededor del 45%.

El nuevo carnet incluye los ocho partidos que se disputarán en el Barris Nord en esta segunda vuelta, más el último de la primera, que es el derbi contra el Manresa, con la posibilidad añadida de comprar la entrada para el duelo frente al Castellón, el penúltimo de la primera vuelta, por solo 5 euros. Los precios para el aficionado sénior van desde los 65 euros para las zonas de tribuna alta y curva hasta los 95 de la tribuna baja, mientras que el familiar va de 130 a 155 euros. El júnior costará entre 50 y 65 euros.

“El contrato acaba el 23 de diciembre, pero no sería inteligente cerrar la puerta a que siga”

El club espera recuperar y, a ser posible, superar los 2.200 abonados de la pasada temporada, récord absoluto en la corta historia de la entidad. Ahora, la masa social del Força Lleida roza los 2.000, una cifra que está lejos aún de las aspiraciones que tiene su presidente, Félix González. “Si queremos ser un equipo referente en la Liga tenemos que tener un mínimo de 3.000 abonados. Por eso hacemos un llamamiento a la afición para que venga al Barris porque les espera una segunda vuelta fantástica”, indicó.

Comenge no cierra la puerta a la continuidad de Rozitis El técnico de Actel Lleida, Borja Comenge, no dio por descartada la continuidad de Davis Rozitis más allá del 23 de diciembre, día en que acaba su contrato con el club. “El contrato está claro, es hasta el 23 de diciembre, pero a partir de aquí creo que no sería inteligente cerrar cualquier puerta”, apuntó el técnico, que añadió: “Ya se sabe que en el mundo del deporte profesional, y más quedando dos partidos por medio (Melilla y Castellón), todo puede pasar. Si tuviéramos cualquier problema con el jugador aquí, evidentemente intentaríamos que continuara. También queremos escuchar al jugador, porque igual no querría seguir con nosotros. Está claro que cuando toque, nos sentaremos con él y hablaremos”, zanjó Comenge.