Los triples ahogan al Cadí la Seu

El Cadí La Seu no pudo dar la sorpresa y tuvo que hincar la rodilla ante el potencial del Uni Girona, que se resarció de la dolorosa eliminación europea a manos del Galatasaray con un triunfo trabajado que no pudo cerrar hasta el ecuador del último cuarto (63-76). El mal porcentaje de las urgelenses en el triple, con 7 canastas de 31 intentos, por el 9 de 19 de las gerundenses, acabó siendo determinante en una derrota que deja a las de Bernat Canut en la quinta plaza, aún en zona de play off pero empatadas con Gipuzkoa y Bizkaia.

Al Cadí le costó entrar en el partido, concretamente casi tres minutos, el tiempo que necesitó para anotar su primera canasta en el tercer intento de Richards bajo el aro. Hasta entonces, el Girona había castigado a su rival desde su poderoso juego interior, con Evans y Colhado firmando las dos primeras canastas (4-0). Pero las urgelenses reaccionaron con un parcial de 6-0, con cuatro puntos de Bahí, y el duelo mantuvo la igualdad hasta el final del primer cuarto, que acabó con un pobre 13-15. Y es que los dos equipos rivalizaron en errores, el Cadí en el triple (1 de 6) y el Girona en los pases (7 pérdidas).

El segundo asalto comenzó como el primero, con un parcial visitante de 0-4 gracias otra vez a su juego interior, esta vez con Alminaite de referente, el techo de la Liga con sus 2,05 metros. La lituana sembró el pánico en la zona por momentos, reboteando, taponando y anotando cuatro puntos seguidos que llevaron al Girona a su máxima renta (8 puntos, 13-21, m.12). El Cadí devolvió el golpe con un parcial de 5-0, rompiendo Ramirez un pésimo acierto en el triple (1 de 10). La segunda canasta de tres de Kraker y la efectividad de Richards y Ramirez bajo el aro mantuvieron la igualdad al descanso (32-34).

El Girona volvió a entrar mejor en el partido a la vuelta de los vestuarios. Liderado por Mendy, Colhado y Núria Martínez, el cuadro gerundense volvió a dispararse y alcanzó otra máxima renta, ahora de diez puntos (37-47, m.14), obligando a Canut a pedir tiempo muerto. El mensaje del técnico caló en sus jugadoras, que en cuatro minutos le dieron la vuelta al marcador con un parcial de 11-1, de los cuales ocho puntos llevaron la firma de Caitlyn Ramirez. Un intercambio de triples permitió al Girona llegar al final del tercer cuarto con una renta de cinco puntos (51-56).

El Cadí seguía haciendo la goma, que al final acabó por romperse. La calidad de las gerundenses, vigentes subcampeonas y segundas de la Liga, acabó por imponerse. Sus referentes volvieron a aparecer y los triples de Mendy, Buch y Núria Martínez, que acabó con un ‘doble-doble’, acabaron por sentenciar el duelo, a pesar de que las leridanas batallaron hasta el final.

“Han tenido que usar todas sus armas para ganar” Bernat Canut estaba ayer satisfecho pese a perder. “Sabíamos de la dificultad y teníamos claro que de este partido teníamos que salir reforzados aun perdiendo, y creo que sacaremos cosas muy positivas”, dijo, al tiempo que destacó que “el Girona ha tenido que utilizar todas sus armas para poder ganar el partido”.