HOCKEY SOBRE PATINES OK LIGA
Demasiadas adversidades
El ICG Software Lleida no pudo festejar la conquista de la Copa CERS con una victoria en Caldes, que le hubiera acercado a la cuarta posición que da el billete para la Liga Europea. Pese al cansancio y los contratiempos en forma de lesiones (Roberto Di Benedetto fue baja y Darío Giménez, Andreu Tomàs y Joan Cañellas jugaron mermados), los de Albert Folguera dieron la cara, compitieron y a punto estuvieron de llevarse algo positivo. Pero el agotamiento acumulado, después de jugar tres partidos (los dos de la Final Four, con sendas prórrogas incluidas, y el de ayer) en poco más de 60 horas, acabó pasando factura.
El partido no comenzó bien. Después de que Lluís Tomàs detuviera una falta directa por la exclusión de su hermano, Rosa adelantaba a los barceloneses de penalti. El ICG reaccionó y Candanedo, que ya había avisado con un tiro al palo, empató (1-1), llegándose al descanso en tablas después de que Lluís Tomàs detuviera otra falta directa.
En la reanudación, el Llista salió a por todas y Andreu Tomàs puso a su equipo con dos goles de renta (1-3), primero con un disparo desde media pista y luego al transformar un penalti. Darío Giménez, que quiso jugar pese a que el médico le recomendó no hacerlo, tuvo la sentencia con una falta directa por la exclusión de Alexandre Acsensi, pero el argentino, con dolores en un tobillo, no atinó y perdonó al Caldes.
Esta jugada dio aire a los barceloneses que, viendo a los leridanos fundidos físicamente, atacaron sin cuartel, marcando tres goles en apenas cuatro minutos que les ponía de nuevo en ventaja (4-3). Pero el ICG no se rindió y aún sacó fuerzas de donde no había. Bruno Di Benedetto empató y Darío volvió a tener otra falta directa para dar ventaja, pero erró. Al final, Rosa sentenció con el 5-4 a un Llista que acabó con 4 jugadores en pista por la exclusión de Lluís Tomàs.