El Lleida sigue vivo

El Lleida llegará a la última jornada de la fase regular de la Liga con opciones de disputar el play off de ascenso a la Segunda división A. Después de ganar ayer por 1-0 al Olot, gracias a un autogol del equipo gerundense, el Lleida sigue vivo en la lucha por el play off, aunque éste pasa por ganar el próximo domingo en Sabadell y que sus tres rivales, Cornellà, Ebro y Ontinyent, fallen. Difícil, pero no imposible y, al menos, el equipo ha conseguido su objetivo de llegar con opciones al último partido de la Liga.

El Lleida derrotó ayer al Olot. Lo más importante era la victoria. Y la consiguió. Lo hizo sin jugar bien, lo que provocó silbidos y pañolada desde la grada en varias fases del encuentro. El equipo no estuvo fino. De hecho, no parece un aspirante al play off, pero sigue vivo y con opciones. Pocas, pero con opciones, al fin y al cabo. Y en fútbol, todo es posible.

El conjunto de Gerard Albadalejo afrontaba ayer su enésima final. La victoria del Cornellà le obligaba a ganar para mantener sus opciones. El empate les dejaba fuera. Solo la fe invitaba al optimismo, porque los precedentes no eran buenos. Solamente habían sumado 4 puntos de los últimos 18 que habían disputado. ¡Cómo se echarán en falta los tres puntos ante el Formentera! Eso por no buscar otros partidos –y no son pocos–, en los que el Lleida no ha dado la talla. Qué distinta sería la última jornada solo con tres puntos más. Pero la realidad muestra a un equipo que está a tres puntos de la cuarta plaza, a la que optan otros dos equipos que tienen más puntos que los leridanos.

La presión parece afectar al equipo. El Lleida, que habitualmente genera muchas ocasiones y tiene el mando del partido, lo pasó ayer muy mal ante un Olot que lucha por la permanencia. Un par de remates bien dirigidos es un balance ofensivo muy pobre para un equipo que tiene el ascenso como objetivo desde que comenzó la temporada. Y encima, logró la victoria gracias a un autogol del Olot. Los gerundenses, además, reclamaron un posible penalti por manos dentro del área a falta de cinco minutos para el final.

En la primera parte el Lleida solo dispuso de una ocasión clara, con un remate al poste de Juanto Ortuño. El Olot, en cambio, tuvo más llegada y más ocasiones, pero sus delanteros carecieron de pegada.

El partido se decidió en el minuto 68. Pumar se internó por la banda izquierda y lanzó un envenenado centro al área. Jorge Félix, que no marca desde el 18 de febrero, buscó el remate, pero el defensa Carles Mas introdujo el balón en su propia portería para hacer subir el 1-0. Solo Pumar, en el 81, dispuso de otra ocasión para marcar. Nada más. El domingo, en Sabadell, toca apelar a la heróica. Pero el equipo depende de una carambola a cuatro bandas.