Remontada del Borges

Borges y EFAC Almacelles cerraron ayer la temporada con el último derbi de Primera Catalana plagado de goles, en el que los locales le dieron la vuelta al 0-2 inicial, gracias en parte a la expulsión del meta visitante Pau poco antes del descanso, para acabar goleando por 5-2.

Una derrota intrascendente para los de Pablo Petreñas, que ahora deberán esperar para saber si la próxima campaña jugarán en Tercera división o seguirán en la misma categoría. Y es que como mejor tercer clasificado de los dos grupos de Primera Catalana, el EFAC sería el equipo beneficiado en caso de que dos clubes catalanes lograran subir a Segunda B y el Llagostera sellara su permanencia. Si el equipo gerundense no lograra finalmente la salvación, el conjunto del Segrià necesitaría entonces que tres de los cuatro equipos catalanes que aspiran a jugar en Segunda B lograran su objetivo.

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El derbi local empezó a moverse al poco de iniciarse, cuando Rafa resolvió un rápido ataque visitante para hacer subir el 0-1. Antes de cumplirse la media hora de partido, Òscar Canadell establecía el 0-2 al aprovechar un centro desde la derecha. El Borges acortó distancias en el último minuto de la primera mitad por mediación de Montoy, cuando el EFAC ya jugaba con un hombre menos por la expulsión de su portero Pau con roja directa.

Nada más reanudarse el partido, de nuevo Montoy vio portería, esta vez gracias a un servicio de Ander, y restableció la igualada (2-2). El Borges fue el dueño y señor de la segunda mitad y dominó a un EFAC que acusó mucho jugar en inferioridad. En apenas dos minutos, los locales le dieron la vuelta al marcador con sendos goles de Ander y Torné, y este último sentenció el derbi con el quinto tanto en el 72.