¿Un nuevo velódromo?

El velódromo del Camp d’Esports en el que tantas veces se entrenó y aún utiliza el doble bronce olímpico Sergi Escobar podría no llegarse a rehabilitar y construir uno nuevo en otro lugar. Esta es, al menos, la apuesta del propio Escobar, que mantiene contactos con la Paeria desde hace tiempo acerca de este tema. El organizador de la Volta a Lleida explicó a SEGRE que “hace tiempo que estoy moviendo hilos, manteniendo reuniones y es un tema complicado porque hay problemas de terrenos y otras muchas cosas. Pero estoy intentando que en un periodo no muy largo de tiempo haya una solución. Yo apuesto por una reubicación del velódromo y mi opinión personal es que lo mejor sería contruir uno nuevo”.

Como siempre, además de encontrar terrenos, el problema es económico. No obstante, el segundo teniente de alcalde y concejal de urbanismo, Félix Larrosa, admitió a este diario que “estamos trabajando en diferentes escenarios. No descartamos nada”.

La pista está llena de baches, graffitis y grietas por donde salen hierbas, y se practica el botellón

El deterioro de la instalación es cada vez más notorio. La pista está llena de baches y de pintadas de graffitis y salen hierbas de las grietas del suelo. Además, cuando llega el buen tiempo, grupos de jóvenes practican el botellón dentro del recinto dejando restos de comida, botellas de vidrio, envases y recipientes de todo tipo.

La instalación, que tiene una longitud de cuerda de 250 metros por 6 metros de amplitud y en su interior dispone de una pista básica polideportiva, se remodeló en 2004 con una inversión de 80.000 euros tras ganar Escobar los dos bronces olímpicos.

Periódicamente, la Paeria hace actuaciones de limpieza y acondicionamiento que consisten básicamente en retirar las hierbas y los matorrales que crecen en la pista, pero el problema lejos de resolverse, se eterniza.