DEPORTES
Messi se va a casa
Francia, con un brillante Mbappé que hizo un doblete, avanza a cuartos tras arrollar a una Argentina a la que no le bastó su orgullo y con un Leo casi desaparecido en su fallido cuarto y quizás último Mundial || Los galos se medirán a la Uruguay de Luis Suárez
Francia se llevó un cruce de altura (4-3) ante Argentina para meterse en cuartos de final del Mundial de Rusia 2018, con la autoridad y solidez de un equipo hecho y derecho, contra una ‘albiceleste’ que se quedó sin vidas a pesar de ponerse 1-2 en la reanudación, desarbolada por Kylian Mbappé, el nuevo fenómeno del fútbol mundial de solo 19 años. El llanto de Messi marca un final triste para el mejor futbolista del mundo que jugó su cuarto y quizás último Mundial. Los ‘Bleus’, que se medirán el viernes con la Uruguay de Luis Suárez por un puesto en semifinales, terminaron por hacer descarrilar el tren argentino. Un vehículo sin rumbo ni conductor, a pesar de que logró remontar un primer gol de Griezmann, de penalti tras la primera exhibición de Mbappé. Ángel di María y Mercado dieron la vuelta al marcador, pero un golazo de Pavard y un doblete del ariete del PSG remontaron para la campeona del mundo en 1998.
Argentina se fue a la calle cuando mejor parecía tenerlo. Fue un espejismo en el juego sin red, que terminó en un baño de realidad para una selección que llegó de milagro al Mundial y necesitó otro para estar en los cruces. En su partido 15, Jorge Sampaoli volvió a improvisar, pese a tener otro nervio, también en un Messi incapaz de evitar la despedida del que apuntaba a ‘su’ Mundial, en un plan que se comió la Francia de Deschamps, hombre récord en ese banquillo con 80 partidos.
La Albiceleste, que comenzó perdiendo 1-0, llegó a ponerse 1-2, pero los galos remontaron
Argentina sufrió, quizá como esperaba o un poco más. En el enésimo cambio de esquema de Sampaoli, su equipo de nuevo hizo aguas en una primera mitad que dejó a las claras la diferencia en mimbres entre ambas selecciones. Francia sí lo tenía claro. Con esa cuarta marcha con la que de momento había cumplido en Rusia sacó a los argentinos de su campo y vivió a la carrera en veloces transiciones.
La pesadilla para la vigente subcampeona fue Mbappé. El delantero del PSG se marcó la jugada del Mundial, desde la frontal de su área pasando por la derecha a cuanto rival se encontró, hasta que Rojo decidió en mal lugar ponerle freno. El penalti lo transformó Griezmann, que antes había estrellado una falta al larguero.
La cuesta volvió a ser empinada en Rusia para la ‘albiceleste’, sin un solo tiro a puerta, sin profundidad en Pavón ni Di María, sin esta vez el criterio de Banega, sin que Messi lograra conectar con el partido ni con sus compañeros, y con Agüero, Higuaín y Dybala en el banquillo. Messi no tardó en salir de ese falso nueve que imaginó Sampaoli. Se marchó a la banda y apareció en el medio, para crear las primeras jugadas ofensivas de los suyos. El ‘10’ buscó su sitio, como lo hizo Di María, sin incidencia en la banda, para aparecer en la frontal y hacer el 1-1 con un golazo justo antes del descanso. Una nueva vida para los de Sampaoli, bien aprovechada en la reanudación para poner incluso el 1-2, con Mercado desviando un tiro de Messi.
Le tocaba responder a Francia, la que está señalada por falta de sangre, experiencia o pasión. No le hizo falta tampoco despeinarse a los ‘Bleus’ para poner la quinta y sexta marcha con disimulo y sin piedad.
En una jugada por banda izquierda de Lucas Hernández, apareció solo en la otra Pavard para mandar el balón a la escuadra. La montaña rusa se comía de nuevo a la ‘albiceleste’, sin fútbol ni presencia sobre el césped para impedir el correcalles francés. El que temía Sampaoli en la previa y el que aprovecharon Francia y Mbappé, con dos goles en cuatro minutos, para presentar la candidatura gala en Rusia.
Sin el juego, la campeona del mundo en 1978 y 1986 trató de sacar algo de fe, aunque ya tarde como quizá llegaron los cambios. Agüero recortó en el minuto 93 y, volcada, llegó a tener la última sobre la bocina. Sin red, se terminaron las vidas argentinas, tras semanas de incertidumbres, dudas y muchos apuros que culminaron en eliminación, ante el festival de un Mbappé que despidió a Messi de su cuarto intento fallido en un Mundial.