Degenkolb gana al sprint

El ciclista alemán del Trek-Segafredo, John Degenkolb, logró llevarse la novena etapa del Tour de Francia, disputada sobre 156.5 kilómetros, entre las localidades de Arras Citadelle y de Roubaix.

Las caídas y abandonos protagonizaron la novena etapa desde los primeros compases de la prueba, abandonos como los de hombres importantes como José Joaquín Rojas (Movistar) o el australiano Richie Porte (BMC Racing) que lo hicieron en el kilómetro 7 tras una caída. El ciclista aussie abandonó la etapa con gestos de dolor y en ambulancia y unas horas más tarde su equipo anunciaba la retirada del ciclista de la competición.

Nada más arrancar el intinerario se sucedieron varios ataques y escapadas hasta que en el kilómetro 19 se fusionó la cabeza de carrera y su grupo perseguidor, formándose una escapada de 10 corredores.

El pavés puso a prueba las estrategias de los equipo y, en particular, al francés Romain Bardet (AG2R), la gran esperanza de la afición local, pero el francés pinchó a falta de 103 kilómetros y cambió de bici hasta en dos ocasiones, además de irse al suelo más adelante en una retahíla de caídas bastante previsible. A estas se sumaron más accidentes a falta de 80, 70 y 67 kilómetros para la meta en los que estuvieron involucrados varios corredores.

A 16,1 kilómetros de la meta se agitó la carrera, con arreones de los hombres potentes que finalmente brindaron la victoria a Degenkolb. El alemán se adjudico el sprint con relativa sencillez frente a un Van Avermaet que, fue segundo, mantinene el maillot amarillo como líder de la general.