Las peñas piden explicaciones

Tres peñas del Lleida Esportiu (Rudes Lleida, És un Sentiment y Molo Esportiu) y la asociación Amics del Lleida emitieron ayer un comunicado conjunto en el que reclaman a los dirigentes del club que den explicaciones acerca del embargo preventivo que pesa sobre la entidad, de casi un millón de euros. Los cuatro colectivos de aficionados expresan así su malestar con el club por segunda vez mediante un escrito conjunto, después de que el 12 de julio de 2016 criticaran la falta de gestos de agradecimiento por parte de la entidad a los jugadores que se fueron del equipo tras llevarle a las puertas del ascenso y pese a no estar al corriente de cobro durante varios meses.

En el comunicado, difundido a través de las redes sociales, estos grupos señalan que “debido a la preocupación e inquietud que ha provocado en gran parte de la afición esta noticia (el embargo) y sin que a día de hoy el club se haya pronunciado al respecto, creemos necesaria una explicación oficial por parte del club para poder conocer su versión sobre este hecho”. Finalizan el escrito queriendo dejar claro que “manifestamos, para que no haya ninguna duda que, como hemos hecho siempre, daremos nuestro apoyo incondicional a la plantilla y cuerpo técnico”.

Por su parte, la recién creada peña Blues Nord (el club anunció su fundación en junio pasado), tras un año de funcionamiento de la Grada d’Animació auspiciada por el club, no solo se desmarcó sino que reaccionó a la carta criticando el proceder de los otros colectivos. “Y como siempre en esta ciudad, las entidades quieren mantener el ‘statu quo’ sea como sea. Queremos manifestar que ninguna de estas entidades se ha puesto en contacto con nuestra junta directiva para tratar de emitir un comunicado conjunto. Si la gente quiere sumar, esta actitud no ayuda”, dice el texto de Blues Nord en Twitter adjuntando el comunicado de las otras peñas.

Mientras, el club mantiene su postura de guardar silencio respecto al tema. El mismo día que este diario elaboraba la noticia el presidente Albert Esteve declaró que no les constaba ningún requerimiento.