DEPORTES
Un Barça insaciable
El doblete (Liga y Copa) obtenido el curso pasado por Ernesto Valverde en su debut en el FC Barcelona ya es historia. El club y la afición le va a pedir al preparador extremeño para esta temporada la Liga de Campeones, además de revalidar la Liga que abre hoy ante el Alavés (ver página 28).
La forma como se produjo el tropiezo en Roma que apeó al Barça de la pasada Liga de Campeones aún está viva en el recuerdo de los barcelonistas, que aunque celebraron como se merecen los dos títulos del curso pasado, les quedó un muy mal sabor de boca por cómo un equipo claramente inferior les apeó de una competición que el club había puesto como prioritaria en los objetivos de la temporada.
Parte como campeón de Liga, habiendo logrado además el récord de imbatibilidad (43 partidos).
Este año, Valverde inicia su segundo curso, sin el capitán Andrés Iniesta, quien se despidió del club y apostó por una aventura en el Vissel Kobe japonés. Otro que ha puesto rumbo a Asia ha sido el brasileño Paulinho Bezerra (Guangzhou Evergrande), cuya baja ha obligado a la entidad a buscar un futbolistas con similares características para contentar al técnico, y así ha sido cómo se ha plasmado la llegada del chileno Arturo Vidal, del Bayern Múnich.
Además del internacional suramericano, por el cual el Barça ha pagado al Bayern 19 millones de euros, el club azulgrana se ha hecho con tres jugadores más, uno por línea: el defensa francés Clément Lenglet (Sevilla), el atacante Malcom Filipe Silva de Oliveira (Girondins), y el medio Arthur Melo (Gremio), ambos brasileños.
El Barcelona afronta la Liga tras ganarla por séptima vez en diez años. Además de la superioridad incontestable, lo hizo rompiendo uno de los récords más antiguos, el de imbatibilidad que tenía la Real Sociedad entre el final de la temporada 1978-79 y un buen trecho de la 79-80, con 38 partidos sin perder. El Barcelona lo elevó hasta los 43 partidos, cayendo en la penúltima jornada en el campo del Levante (5-4), a dos jornadas del campeonato perfecto.
En la portería, Ter Stegen volverá a ser el titular, condición que volvió a defender en la gira americana cuando se habló de si Cillessen estaba planteándose dar un salto a otro equipo en busca de la titularidad. El tercer meta, Ortolà, ha sido cedido al Deportivo, en Segunda. En la defensa, el Barça pierde a dos laterales (Digne, al Everton, y Aleix Vidal, al Sevilla), pero se ha reforzado por el centro con Lenglet, aunque todo apunta a que la pareja de centrales seguirá siendo Piqué y el reciente campeón del mundo, Umtiti, quedando Vermaelen como tercera opción tras el adiós de Yerri Mina (Everton). En los laterales, Alba tendrá competencia del filial, mientras que en la derecha, Sergi Roberto volverá a desear un año más regresar a su hábitat natural, el centro del campo, aunque dependerá de si Semedo es capaz de afianzarse.
El centro del campo es la zona donde más movimiento ha habido. La marcha de Iniesta debería permitir a Coutinho consolidarse en la izquierda, junto a Busquets y Rakitic, finalista en el Mundial. No obstante, las llegadas de Vidal y de Arthur, tras buenas actuaciones en la gira americana, generarán mucha competencia.
Algo parecido sucederá delante. Al cumplirse ya un año de la marcha de Neymar, el Barça sigue sin haber consagrado a ninguno de sus sustitutos, especialmente Dembélé, quien este año ha entrado incluso en las quinielas para irse a pesar de haber sido una de las grandes contrataciones del pasado año. El francés se jugará el puesto con una de las sensaciones del verano, Malcom, quien ahora mismo tiene todos los números para hacer tridente con Luis Suárez y Messi. La estrella argentina impulsará un año más al equipo, ahora como capitán.