¡¡¡Otra vez líderes!!!

El Força Lleida confirmó ayer que su arranque de Liga no es fruto de la casualidad y lo hizo con una victoria convincente y de prestigio ante uno de los grandes de la Liga, el Palencia, que llegaba como líder y único equipo invicto y que se fue de vacío y destronado por los de negro (90-80), que vuelven a mandar en la LEB Oro gracias a su mejor ‘average’.

El Lleida comenzó algo frío, con demasiadas concesiones en defensa y fallón en ataque. A ello contribuyó las dos faltas en ataque que le señalaron a Fall en apenas cuatro minutos y que obligaron a Serna a sustituirle por Mbaye. Entonces el marcador señalaba un ajustado 7-9 y los leridanos estaban viviendo de los triples de Turner. Dos consecutivos del estadounidense más una canasta de dos puntos permitieron reconducir el partido (12-12) tras el 1-5 inicial.

Fue de menos a más y acabó ahogando a su rival en intensidad, llegando a tener 19 puntos de renta

A partir de ahí la situación empezó a dar un vuelco. El Lleida apretó en defensa y entró en juego Djuran. Dos triples del serbio y cuatro puntos de Kyei, dos de ellos con un mate después de un robo de balón de Turner, dieron la primera diferencia significativa, seis puntos (22-16, m.8), lo que obligó al técnico castellano a parar el partido. Los de negro estaban enchufados y no perdonaron. Dos triples de Feliu y Chapela y una canasta de Mbaye ensancharon aún más la ventaja, que ya era de 12 puntos (30-18, m.8), reducida a nueve al final del cuarto con un triple postrero de Hermanson.

El Força Lleida estaba pasando por encima del líder a base de triples (6 convertidos de 10 lanzamientos), pero faltaba equilibrio. Eso lo solucionó en el segundo cuarto con la aparición de Stutz. Asumiendo el rol de ‘5’ –Fall estaba en el banco con dos faltas–, el estadounidense se hartó de anotar (10 puntos en este segundo periodo), tanto en jugadas personales como en combinaciones con Turner, algunas de gran mérito que hicieron levantar al púbico de sus asientos. Todo ello permitió a los leridanos mantener a raya a su rival, que en varias ocasiones dio visos de reaccionar.

Lo hizo básicamente sacando provecho de algún despiste defensivo en las ayudas del Força Lleida y a la experiencia de Otegui, pero nunca pudo concretar la remontada. La irrupción de nuevo de Turner, con dos acciones consecutivas (una penetración y una canasta en suspensión), y un triple de Quintela, muy gris hasta entonces, volvieron a elevar la renta por encima de la decena de puntos (52-41), que se mantuvo hasta el descanso (54-43).

El Força Lleida, a diferencia de otras veces, volvió de los vestuarios con la misma energía y eso se tradujo en una nueva máxima diferencia a las primeras de cambio, 16 puntos (63-47, m.23). La defensa estaba asfixiando al Palencia, sobre todo a Otegui, a quien Kyei desquició con dos robos de balón consecutivos. Los de negro estaban on fire y esta vez no bajaron el ritmo. Triple de Feliu, canasta sobre la bocina de Turner y rebote ofensivo de Kyei para situar la máxima de todo el partido, 19 puntos (70-51). El Barris Nord era una fiesta y su afición se frotaba los ojos. Su equipo estaba bailando a todo un líder con el potencial del Palencia.

Los castellanos echaron mano de sus referentes. Ahí aparecieron Henderson, Vasturia... y los árbitros, que con varias decisiones controvertidas, como una antideportiva sobre Turner, dejaron un poco tocados a los leridanos, que vieron reducida su ventaja a diez puntos antes de afrontar el último asalto (74-64).

Un triple nada más arrancar el cuarto de Djuran dio cierta tranquilidad, pero el Palencia apretó y empezó a recortar. El balón empezaba a quemar en las manos. Varios ataques fallidos dieron vida a su rival. Por suerte, acciones puntuales de Djuran, Chapela y Fall, dando segundas opciones en ataque, minimizaron los daños para que el Força Lleida tumbara definitivamente al Palencia para recuperar de nuevo el liderato de la LEB Oro. Verlo para creerlo.