DEPORTES_LUNES
Asalto al Camp Nou
El Betis asaltó ayer el Camp Nou, donde el Barça hacía 26 meses que no conocía la derrota (42 partidos), y ganó por 3-4 en un partido sensacional de los de Quique Setién, cuya atrevida apuesta futbolística sirvió para doblegar al líder en su propio estadio y apretar un poco más la Liga. La última derrota liguera en el Camp Nou de los azulgranas, que ayer recuperaban a su estrella, Messi, después de tres semanas fuera por lesión, se remontaba al 10 de septiembre de 2016, cuando el Alavés (1-2) se llevó los tres puntos en la tercera jornada.
El planteamiento del técnico cántabro dio sus frutos en una primera parte en la que los andaluces amarraron una cómoda ventaja (0-2). El Barça, siempre a remolque, buscó la remontada con el 1-2, el 2-3 e incluso el 3-4, pero el cuadro verdiblanco ató su primera victoria en 20 años en liga en el Camp Nou, que premió el partido de sus rivales ovacionando los cambios de Lo Celso y Joaquín, uno de los goleadores.
El equipo jugó mal y le faltó algo de fortuna, y hasta Ter Stegen cometió un error infantil que costó un gol
Después de cinco partidos de ausencia, Messi regresaba al campo como titular, y Malcom encontraba su oportunidad en el once mientras el ‘castigado’ Ousmane Dembélé observaba el encuentro desde la grada. En un duelo por el control del balón en el coliseo azulgrana, Quique Setién planteó una marca al hombre en todo el campo, con Giovanni Lo Celso y Loren presionando arriba para impedir que el cuadro de Valverde pudiese salir con facilidad desde atrás. Aun así, en el primer minuto Messi avisó de su regreso en un disparo cruzado tras un centro de Malcom.
A pesar de todo, el conjunto bético no se sintió intimidado y a punto estuvo de abrir el marcador en el minuto 6, cuando Lo Celso asistió para Joaquín, que solo ante Ter Stegen mandó el balón a las nubes. No falló, sin embargo, el lateral Junior Firpo poco después, en una acción de contraataque en la que se plantó ante Sergi Roberto, le recortó a la perfección y batió con un disparo raso al guardameta culé (min.19), que no se esperaba el disparo al palo corto.
La reacción azulgrana, que obligó a una providencial mano de Pau López tras un remate acrobático de Lenglet (min.24), se diluyó pronto en un aplastante control verdiblanco. Antes de la media hora, Ter Stegen desbarató milagrosamente un disparo a bocajarro de Tello, pero el Betis ya había olido la sangre. Así, solo unos minutos después, el delantero sabadellense recogió un centro pasado y lo volvió a poner al punto de penalti, donde apareció Joaquín para rematar a placer y desatar el pánico en el Camp Nou (min.33).
La primera mitad, salvo los primeros minutos, fue un festival de juego ofensivo de los de Quique Setién, que superaban con sorprendente facilidad la presión azulgrana para plantarse una y otra vez en el área local. El Barça ni siquiera pudo aferrarse a la vuelta de Messi para darle la vuelta al partido. Solo disparó una vez entre los tres palos, el mencionado remate de Lenglet que obligó a lucirse a Pau López. El resto fue un quiero y no puedo de los de Valverde. Algún eslalon de Messi que acabó en nada, un acción individual de Malcom, ayer titular, que finalizaba con un tiro demasiado alto, y otro remate desviado de Luis Suárez fue todo el caudal ofensivo local en el primer acto del partido.
En busca de la remontada, Valverde dio entrada a Arturo Vidal por un Arthur superado en todo momento por el centro del campo bético, que ahogó todas las líneas de pase del brasileño. El Barça ofreció una mejor cara tras la reanudación. La energía del chileno contagió al equipo, que puso cerco a la portería bética, con presión alta y recuperación tras pérdida. Precisamente Vidal inauguró las ocasiones culés en un disparo que atajó Pau López, antes de que Messi lo intentara con un balón que se marchó rozando el palo izquierdo.
El arranque local animó el Camp Nou, que rápidamente captó que su equipo necesitaba de su aliento para intentar darle la vuelta al choque. Busquets cabeceaba alto un córner y Luis Suárez disparaba al exterior de la red, pero el Barcelona no encontraba el camino del gol y al equipo de Setién se le empezó a pasar el agobio.
Las llegadas con peligro al área verdiblanca comenzaron a sucederse y el Camp Nou recuperó la fe cuando Tello derribó a Jordi Alba y Mateu Lahoz decretó penalti. Leo Messi, que no veía puerta desde su lesión ante el Sevilla, superó con un lanzamiento potente al meta visitante (min.67), imparable para Pau López. La remontada todavía parecía posible, pero un error del siempre impecable Ter Stegen aplacaba momentáneamente las esperanzas de los de Valverde. El portero alemán quiso atrapar con las manos un disparo de Lo Celso, pero se le escapó y se coló en el fondo de las mallas (min.71). Los andaluces respiraron de nuevo y los azulgranas volvían a ver el partido muy cuesta arriba.
Aunque Arturo Vidal volvería a recortar distancias en un tanto que tuvo que validad el VAR por posible fuera de juego, a diez minutos del final, Canales frenaría, de nuevo, la reacción del Barça sentenciando el partido dos minutos después. En la jugada anterior, los azulgranas habían perdido además a Rakitic por doble amonestación, y aunque Messi haría el tercero para su equipo en el añadido, otra vez con el suspense del VAR, ya no hubo tiempo para más. El Betis volvió a ganar en Liga 20 años después en el Camp Nou, que veía así rota su imbatibilidad de 26 meses.