ARTES MARCIALES COMPETICIÓN INTERNACIONAL
Un leridano en el Mundial de taekwondo
Joel Lee Bruna compite con España en el Campeonato del Mundo que se celebra estos días en Taiwán || Participa en trío sincronizado, modalidad en la que ya es subcampeón de Europa
Joel Lee Bruna (5-1-1982, Lleida) lleva toda la vida dedicado al taekwondo, deporte del que su padre, el coreano Lee Young Boo, es uno de los pioneros en la ciudad desde su club, el Do San Lee. Internacional con España desde hace cuatro años, compitiendo en la modalidad de trío sincronizado, participa estos días en el Campeonato del Mundo de Taekwondo de Poomsae (técnica), que se celebra en Taipei, la capital de la República de China (Taiwán), donde espera prolongar su exitosa carrera. Campeón universitario, campeón de Catalunya y campeón de España en varias ocasiones, junto a Sergi de Castro y José Luis Estudillo ya se colgó la medalla de plata en el Campeonato de Europa, que se celebró el año pasado en Grecia.
“El objetivo que nos marcamos es dar el máximo de nosotros mismos”, explica Joel. “Nos gustaría subir al podio a recoger una medalla y lucharemos al máximo por conseguirla. Llevamos mucho tiempo preparando esta competición y confiamos en nosotros”, añade el leridano.
El leridano, que lleva 4 años con la selección española, compagina su actividad con la de profesor
Joel Lee Bruna compagina su actividad con la Selección Española con la de profesor en el club Do San Lee y en el Colegio Episcopal. Cinturón negro sexto dan, se especializó en técnica para poder compaginar la actividad deportiva con la laboral. “Compito en este deporte desde muy pequeño y en todas las modalidades, tanto en combate como el poomsae y he compaginado siempre mis estudios con los entrenamintos y, más delante, con la vida laboral. Por eso me especialicé en el poomsae, porque el combate es una modalidad en la que hay más riesgo de lesiones y, debido a mi trabajo, una lesión me supone no poder trabajar”.
Joel explica que los poomsaes son “la parte técnica del taekwondo. Son movimientos a un ritmo concreto y en unas posiciones determinadas. Los movimientos requieren flexibilidad, fuerza, explosividad y, al mismo tiempo, control. Requiere mucho trabajo y dedicación”. Por ello, entrena con sus compañeros “intensamente desde hace cuatro años”, ya que, como explica, “el taekwondo sincronizado requiere mucha precisión y coordinación. Cuando se acerca una competición intensificamos el trabajo”. De momento, ya han logrado competir con los mejores del mundo.