El Lleida B, en racha

Un gol de Gerard Angerri en el minuto 19 fue suficiente para dar los tres puntos a un Lleida Esportiu B que supo nadar y guardar la ropa ante el Borges. Los del Segrià, que hasta ayer no habían ganado ninguno de los cuatro derbis de esta temporada, supieron defenderse de las acometidas visitantes –sobre todo al inicio del segundo tiempo– y encadenar, así, su tercera victoria consecutiva, que le consolida en la zona media y con un punto más que el Borges.

Los blancos, por su parte, tuvieron fases de asedio sobre la portería de Josemi, pero no fueron suficientes para neutralizar el gol inicial y se quedaron por primera vez sin marcar esta temporada. Los de Manel Cazorla –ayer en la grada, sancionado– fueron los que llevaron el peligro al área en los primeros minutos del encuentro, y poco antes del cuarto de hora ya había avisado por medio de un remate de cabeza de Eudald y un tiro inofensivo de Riki. Un comienzo de partido que poco hacía presagiar el gol del Lleida B. Adrià Gené sacó un córner desde la derecha y Angerri remató de cabeza en el corazón del área, llegando el balón a la red tras botar previamente en el suelo (1-0).

Tras el gol, el Borges tiró hacia delante y se aproximó a la zona de peligro, pero sin llegar a finalizar ninguna acción hasta el minuto 26, en un pase de la muerte de Eudald al que Riki llegó muy forzado y no pudo dirigir bien a portería. Antes del descanso, los blancos probaron suerte con un par de centros desde la izquierda, que atrapó Josemi. El Lleida B, que se defendía bien, también pudo marcar con un disparo con efecto desde fuera del área que buscaba la escuadra.

Tras el descanso, el Borges salió a por todas y se apoderó de un partido jugado ya de por sí con mucha intensidad y, ante un árbitro permisivo, al límite de lo reglamentario. La reacción dio sus frutos, dado que en diez minutos tuvo cinco ocasiones, en un remate errado de Soriano, tres disparos laterales –uno de los cuales dio en el poste– y un disparo envenenado que Josemi desvió a córner. Poco después, un remate de cabeza bombeado de Riki impactó en el larguero. La suerte le fue esquiva a un Borges cuyo arreón inicial se fue diluyendo con el paso de los minutos, en parte gracias a la eficaz faceta defensiva del Lleida B. Los azules no llegaron a chutar a portería en toda la segunda parte y trataron de dormir el partido para conservar su valioso botín.