Laia Sanz viaja hacia Lima con un equipaje de 150 kilos

Laia Sanz, trece veces campeona del mundo de trial y cinco de enduro, partió ayer hacia Perú para participar de nuevo en el Dakar, prueba que casi se pierde por culpa de un virus. La barcelonesa, novena en la clasificación absoluta en 2015, competirá por novena vez en el Dakar, que en esta edición se disputará íntegramente en Perú.

Laia calcula que su equipaje pesa unos 150 kilos, sin incluir el material que cada equipo oficial envía en barco meses antes a la sede del rally. Se lleva también la tablet y un libro para el largo viaje; un secador que, más allá de perseguir una finalidad puramente estética, en este caso tiene otro objetivo: “Es importante que me seque el pelo después de la ducha para evitar problemas musculares, especialmente en el cuello, donde he sufrido varias tortícolis por este motivo”, explica.

Entre las novedades, Laia vestirá este año un chaleco de protección que incorpora airbag, un sistema ya implantado en la velocidad, pero inédito en el off road.

El leridano Isidre Esteve y otro habitual, Nani Roma, partieron el día 1 hacia Lima.