Inicio con mal pie

El Força Lleida no pudo comenzar con buen pie el 2019 y acabó sucumbiendo ante el Carramimbre Valladolid en un final agónico (68-72). Los de Jorge Serna se sobrepusieron a las bajas y los problemas físicos y dieron la talla durante casi todo el partido. Llegaron a dominar por seis puntos en el arranque del tercer cuarto y se rehicieron tras encajar un parcial de 0-10 al final del mismo cuarto, pero una antideportiva muy rigurosa sobre Djuran, con el marcador 68-70, acabó con todas las opciones de ganar de un equipo que encadena su tercera derrota.

Jorge Serna apenas tuvo dudas a la hora de confeccionar el cinco inicial dadas las bajas y los problemas físicos que arrastraban algunos de sus jugadores. Sin Fernando Sierra, lesionado de larga duración, y Obi Kyei, baja de última hora, y con Fall renqueante por su fascitis plantar, el técnico apostó por Quintela y Feliu en las alas, Mbaye y Stutz en posiciones interiores y, por primera vez en lo que va de temporada, Chapela en la dirección, quedando en la recámara el recién llegado Josh Steel, ya en posesión del tránsfer internacional.

El equipo, en el que debutó Steel, tuvo que afrontar el partido sin el australiano y con Fall renqueante

Los primeros minutos fueron de tanteo, con buenas defensas de anticipación en ambas canastas y con alternancia en el mando del marcador. Mientras Chapela y Stutz llevaban el peso ofensivo local (9 de los 10 puntos llevaban su firma), en el bando rival era De la Fuente y Hayes los que imponían su ley bajo el tablero en el ecuador del primer cuarto (10-10). Serna, consciente de sus limitaciones físicas debido a las lesiones, empezó a mover el banquillo. Hizo un triple cambio, dando entrada a Fall, Djuran y al joven Lafuente, que ejerció de director junto a Quintela y no desentonó lo más mínimo, más bien todo lo contrario. También tuvo sus primeros minutos Josh Steel, aún en fase de adaptación, pero fue el canterano el protagonista al conseguir un triple que cerraba el periodo (17-19), después de que el Valladolid hubiera logrado una renta de cinco puntos, la máxima lograda hasta entonces (14-19).

En el arranque del segundo asalto, los de Paco García recuperaron los cinco tantos de renta gracias a dos triples casi consecutivos de Novas (23-28), que Fall, con cuatro tiros libres; Djuran, con un triple, y Mbaye con una canasta marca de la casa, lograron abortar (28-28). El Valladolid estaba cómodo y sus exteriores con la mano caliente. Dos acciones de Torres, una de ellas con tiro adicional, volvieron a distanciar al Valladolid (28-33), pero el Força Lleida volvió a la carga, esta vez con un Djuran estelar. Siete puntos consecutivos del serbio, que firmó doce en este cuarto, apretaron el marcador y obligaron a García a parar el partido (35-36). Las directrices del extécnico del Lleida Bàsquet no surtieron efecto de vuelta a la pista, ya que Stutz y Djuran, ambos desde la personal, pusieron por delante a los leridanos después de muchos minutos (38-36). De la Fuente, bajo el aro, volvió a ganarle la partida a su par, pero ahí estaba Quintela para situar la máxima renta para los suyos al descanso con un triple casi sobre la bocina (41-38).

A la vuelta de los vesturios, el Força Lleida continuó enchufado y Mbaye, con un tiro libre, producto de una antideportiva señalada a Hayes, y una canasta en transición, elevaron la renta hasta los seis puntos (44-38), que hubieran sido nueve si el triple de Djuran no se hubiera salido del aro en la jugada posterior. Gantt mantuvo vivo a su equipo con cinco puntos seguidos, mientras que Stutz cometía su tercera falta nada más anotar el 47-44. Los problemas se le acumulaban a Serna, y más cuando el Valladolid encadenó un parcial de 0-10, con tres triples consecutivos de Alvarado, Gantt y Novas que hacían presagiar lo peor (51-55). Pero ahí estaba Feliu con su triple salvador para romper la sequía y entrar en el último asalto con las espadas en todo lo alto.

El Força Lleida había salvado una de sus habituales pájaras de cada partido, pero sin lograr darle la vuelta al marcador, que en todo momento estuvo bajo el control vallisoletano. Los triples de Djuran y Feliu, que ayer tuvo que multiplicarse dentro y fuera ante la baja de Kyei, mantenían vivo al equipo (62-64, m.37), que por entonces ya había perdido a Stutz tras cometer el jugador estadounidense dos faltas seguidas.

Aun así, el Lleida aguantó y un triple de Chapela con suspense puso el 68-70 a 22 segundos para el final. Tiempo de Paco García y en la jugada posterior, antideportiva del todo rigurosa a Djuran que finiquitó prácticamente el partido, si bien los fallos desde la personal de Alvarado y Alejandro Reyes aún pusieron algo de emoción. Al final Chapela erró el último tiro para confirmar la séptima derrota de la temporada, tercera que el Força Lleida encaja de forma consecutiva.