Golpe sobre la mesa

Cuarta victoria de la temporada del Lleida Esportiu B, que se impuso con solvencia ante un rival que acabó rendido ante la mayor eficacia leridana (1-3). La primera parte fue igualada aunque fueron los visitantes los que se adelantaron en el marcador. Tras el descanso, el Cambrils reaccionó pero dos goles en tres minutos fueron una losa muy pesada para los tarraconenses.

Los locales quisieron tomar el mando del partido. Sin embargo, fueron los de Jordi López ‘Mena’ los que supieron crear más situaciones de peligro ante la portería del Cambrils. Y antes del primer cuarto de hora llegó el premio a su mayor acierto. El juvenil Sebi, convocado con el primer equipo hace una semana, lograba adelantar a su equipo al aprovechar un rechace tras un remate de Soldevila que se estrelló en el palo (0-1). Se le ponía el partido de cara muy pronto a los de Mena. El Cambrils no tuvo más remedio que tomar riesgos para intentar devolver la igualdad en el marcador.

Tras el descanso, el Cambrils se puso el mono de trabajo y se lanzó al ataque en busca del empate. Y lo consiguió a los nueve minutos de la reanudación gracias a Erik González, al rematar dentro del área pequeña una falta lanzada por Nico (1-1).

Sin embargo, la alegría en las filas tarraconenses duró muy poco. Exactamente cinco minutos, que fueron los que transcurrieron hasta que Soldevila volvió a poner por delante a los leridanos, al batir a Sergi Fuertes con un disparo a media altura después de regatear a un par de defensas (1-2). Y sin tiempo para reaccionar, el conjunto local encajó el tercero que sentenciaba definitivamente el enfrentamiento. Fue un lanzamiento de falta de Vice que en el intento de rechazar en zona defensiva Jordi Estivill introdujo el balón en su portería.

A partir de ahí, el partido se convirtió en un puro trámite para los hombres de Mena, que se dedicaron a conservar su renta ante un rival que nunca se rindió pero se estrelló por completo ante un muro defensivo visitante.

De esta forma, los de la Terra Ferma rompen una mala racha de siete jornadas sin ganar y tres derrotas consecutivas. Además, doblegan a un rival directo en la lucha por la permanencia en la categoría de la Primera Catalana.

Contento por la victoria, el entrenador del Lleida B destacó al finalizar el partido que “llevábamos días trabajando muy bien. De hecho la semana pasada fue un resultado abultado por lo que fue el partido. Teníamos una gran oportunidad ante el Cambrils para ganarles y lograr, además el average, y lo hemos conseguido” y añadió que “fue un gran partido de mi equipo. Estoy muy contento porque ha trabajado mucho ante unas condiciones difíciles, con el viento en contra”. “Este triunfo nos dará mucha tranquilidad”, sentenció.