Marc, objetivo cumplido

Marc Màrquez cerró ayer el primer test de pretemporada con los objetivos cumplidos y, lo más importante, sin caídas. Más allá de los tiempos –ha logrado el undécimo puesto final en la combinada de los tres días, a 0.931 del estratosférico crono marcado por Petrucci (1:58.239)–, el leridano ha podido rodar, menos de lo que hubiera querido, pero ha completado 105 vueltas al trazado malayo (29 el primer día, 37 el jueves y 39 ayer), probando las innovaciones de su Honda y, sobre todo, cuidando lo mejor posible su hombro izquierdo, operado hace poco más de dos meses.

“El día fue muy positivo porque el jueves por la tarde el hombro se me inflamó y no sabía si iba a poder rodar, pero al final logramos completar el plan programado. Ha sido el mejor día encima de la moto y el ritmo no fue malo. No pude pilotar como quería, pero las cosas me salían fáciles. Sin estar bien, el ritmo era bueno. Me limité a rodar y a olvidarme de las pantallas de tiempo. Los tres días he sufrido, sobre todo el primero y el segundo”, explicó.

“El jueves por la tarde el hombro se me inflamó y no sabía si iba a poder rodar en la última sesión”

Màrquez reconoció que “me habría gustado rodar mucho más, pero mi condición física está lejos del 100%. Lo positivo es todo lo que hemos probado y que no nos hemos caído. No hemos trabajado en la puesta a punto de la moto, sino en las cosas grandes que ha traído Honda y ya con ganas de que en Qatar podamos hacer un test normal”, apuntó. Respecto a los tiempos de ayer, comentó que “la pista estaba fácil porque estas condiciones no las hemos encontrado nunca: había mucho agarre”. Y sobre el desarrollo de su Honda dijo: “Sobre el motor, aún nos queda un test. Creo que el camino a seguir en ese sentido está claro, pero hay que ir con cuidado porque las condiciones que encontramos aquí no las tenemos en todo el año”.

Ducati se marchó de Sepang como la gran dominadora del primer test y pulverizando Petrucci el récord que tenía Jorge Lorenzo. Por detrás del italiano se han situado Francesco Bagnaia, Jack Miller y Andrea Dovizioso, todos ellos de la marca italiana.