Con la cabeza alta

El propio Sergio y Rozitis, con un mate al filo del descanso, se encargaron de dejar el partido encarrilado ante un ICG fundido, que había encajado un parcial de 0-11 para el 27-43. El equipo visitante le había dejado en 6 puntos en un nefasto cuarto (4 de Mbaye y 2 de Quintela).

Inicio calcaldo al del partido en el tercer cuarto, con dos triples seguidos por parte de Chapela y Feliu para el 33-43. Pero si la remontada ya era complicada, entraron en juego los árbitros, parciales a favor de los gallegos. Parcial de 0-5 y tiempo de Serna con el 33-48. El Ourense, con la confianza de tener a los colegiados de su parte, alcanzó una nueva máxima diferencia de 19 puntos (35-54) después de un 2+1 para Rozitis. Kyei dio respuesta con un triple, mientras Djuran, desesperado con los colegiados, cometía su cuarta personal. Poco a poco le fue ganando terreno el ICG Lleida a su rival, a base de aciertos desde el exterior, con Djuran y Chapela muy activos. Gonzalo García paró el partido con el 44-58 a falta de 42 segundos y Zamora, quien si no, cerró el tercer cuarto con otro triple.

La actitud de los jugadores frente a todas las adversidades que se le pusieron por delante durante todo el encuentro

Confiado con tanta ayuda, el Ourense vio como el ICG Força Lleida, apoyado a muerte desde la grada intentaba la heroicidad. Salida en tromba y un parcial de 7-0 culminado con un triple de Feliu, que provocó los nervios en Gonzalo García (51-61). Mantuvieron los leridanos sus mejores minutos y llegaron a situarse a solo cinco puntos de un Ourense que había llegado a mandar por 19 (58-63). Pero apareció otro jugador determinante para los gallegos, Alfredo Ott, que con cinco puntos consecutivos frenó las opciones del ICG Lleida a falta de 3:15. Tiempo de Serna y triple de Quintela. Aún había tiempo, pero se le escurría de las manos al equipo leridano. Dos intentos de triple fallidos y Serna agotó sus tiempos a falta de 48.8 segundos y 61-68 en el marcador. Había que creer. Fallos de Quintela y Chapela en sus nuevos intentos de triple y solo 35 segundos por jugarse. El partido era para el Ourense, pero quedó patente que el ICG Lleida se crece ante las adversidades, demasiadas en el partido de ayer, y que se pudo ir con la cabeza alta de la pista.

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lleida

El ICG Força Lleida vendió muy cara su derrota frente al Ourense (61-70) en un partido en el que Jorge Serna tenía las bajas por lesión de Sierra y Fall, no podía contar con Steel al estar con su selección, y había prescindido de Turner horas antes (ver desglose). Ante este panorama era previsible perder y los leridanos plantaron cara en todo momento, rozando la gesta, ya que perdían por 19 puntos en el tercer cuarto.

Dos triples de Stutz y Chapela inauguraron el partido, con el ICG empeñado en abrir margen lo antes posible, pero el Ourense no se dejó intimidar por el acierto local y cargó su juego sobre Rozitis. La consecuencia fueron dos personales de Stutz, que se fue al banquillo. Kyei le sustituyó y también entró Oliva por Mbaye. El Ourense logró nivelar de nuevo el partido (11-11), pero Chapela anotó su segundo triple, manteniendo el dominio leridano. Dio un pequeño estirón el equipo de Serna, pero de nuevo respondieron los gallegos con un triple de Sergio Rodríguez (18-16). Entró Lafuente en la dirección y también Djuran, buscando los espacios exteriores, pero por parte del Ourense apareció Zamora demostrando una clase digna de ACB. Puso a su equipo por delante, aunque Djuran, con un triple, le devolvió la moneda. Lástima de una nueva genialidad de Zamora, que dejó el 21-22 al final de los primeros diez minutos.

Tardó 47 segundos en tener que pedir tiempo Serna después de dos jugadas espectaculares de Watson (21-26). Peligro de que el Ourense rompiera el partido y sí puso las bases. Zamora y Watson siguieron a lo suyo y el equipo visitante se fue hasta los 7 puntos de margen (25-32). Nuevo tiempo de Serna y respuesta de Mbaye con su característica canasta. Pero ahí se apagó el ICG. Fue incapaz de anotar durante más de cinco minutos. Lógicamente, el Ourense aprovechó la falta de ideas para castigar e irse hasta una máxima de 12 puntos tras una nueva canasta de Sergio Rodríguez (27-39). Encima Djuran cometió su tercera personal.