LO MEJORLO PEOR
Ruleta ganadora
El Lleida encadena su segundo triunfo con un gol de Calavera en el 92 tras perdonar y acabar sufriendo ante el colista, que jugó con 10 desde el minuto 37 || No ganaba fuera desde el 2 de diciembre en Peralada
El Lleida Esportiu sufrió más de la cuenta para sumar los tres puntos en el campo del colista, jugó con fuego pero no se quemó y en la ruleta rusa en la que se convirtió el partido tras el descanso salió ganador. Un gol del joven Josep Calavera prácticamente en la última jugada del encuentro hizo posible que el Lleida encadene su segunda victoria con Oliva al frente y que vuelva a saborear un triunfo a domicilio después de casi tres meses. La trayectoria y hasta el buen fario parece haber regresado a un equipo que presentó altibajos, que sufrió ante un rival que jugó con diez desde el minuto 37, pero que siempre tuvo fe en la victoria como en los buenos tiempos del principio de la temporada. Ahora, con Joan Carles Oliva, el equipo ha sumado 7 de 9 puntos posibles y ha recuperado su ADN y sus buenas sensaciones.
El 2-3 final ‘in extremis’ no puede hacer olvidar el mal inicio de un Lleida que en el minuto 12 ya se vio por detrás en el marcador. Las bajas, sobre todo en defensa, se resolvieron con un tándem en el eje central formado por Noel y César Soriano que fueron de lo mejor del equipo junto al omnipresente Mousa. Noel, tanto tiempo en el dique seco y reaparecido desde hace pocas fechas, se ha convertido en un referente para Oliva. El de Puigverd de Lleida igual rinde como central que como pivote defensivo y se desenvuelve imperial en el campo.
El 1-0 hizo mella en el equipo azul tan solo unos pocos minutos. Mousa, que estando en forma es un puñal por su banda, comenzó a percutir sobre el lateral derecho valencianista. Lo mismo que Centelles por el lado de Dalmau y Quintero que se veían desbordados una y otra vez.
El 1-1 llegó apenas superada la media hora de juego. Mousa se anticipó a la defensa y anotó su segundo gol en dos jornadas y el quinto en esta Liga. Una gran noticia para que el Lleida no tenga que depender solamente de los dos enormes depredadores que tiene delante. Por cierto que Juanto y Pedro estuvieron fallones a más no poder, pero trabajaron mucho y bien y a los defensas rivales les entra el tembleque apenas controlan el balón. Pedro, no obstante, acertó en la primera que tuvo que significó el 1-2 al filo del descanso. Luego, en la segunda parte, falló dos clarísimas, y Juanto otro tanto de lo mismo. A poco que hubieran estado finos alguno de ellos hubiese acabado con un ‘hat trick’.
El Valencia Mestalla, que es colista por algo aunque nadie niega la calidad de algunos de sus jugadores, salió decidido a agitar la botella tras el descanso para intentar remontar el 1-2. La botella traía gas y salió con toda la efervescencia. El gigantón Gassama anotó el 2-2, hizo un larguero y sembró el pánico en el área de Pau Torres. El Lleida perdonó mucho, pero al final cantó bingo y se llevó el premio.