Fin de ciclo del peor Madrid

Fin de ciclo del Real Madrid de Florentino Pérez. El equipo blanco encajó anoche en la vuelta de octavos de final de la Liga de Campeones la derrota más amplia de su historia en la competición, un 1-4 ante el Ajax, que lo eliminó con un juego brillante y efectivo. El conjunto de Solari se dejó remontar el 1-2 que traía de la ida y cierra una semana negra que le deja sin objetivos a su alcance en el mes de marzo. En solo seis días, entre el Barça y el Ajax han barrido cualquier esperanza madridista. Por ello, los gritos de “Florentino dimisión” fueron numerosos a lo largo del partido. El centrocampista holandés Frenkie de Jong fichó por el Barça en enero y, como reveló en una entrevista en “Telegraaf”, le pidieron que “eliminara al Real Madrid” y ayer cumplió con las peticiones de los dirigentes azulgranas.

El Bernabéu despidió con una sonora pitada a un Madrid que ya no puede ni agarrarse a ese clavo ardiendo de los últimos años que era la Champions. El Ajax sometió al Madrid desde el inicio. El marroquí Ziyech, en el minuto 7, y el brasileño David Neres, en el 18, se encargaron de poner el 0-2 antes del descanso. Una renta que ampliaría el serbio Dusan Tadic, el hombre de la eliminatoria, en el 61.

Marco Asensio redujo distancias en el 69, pero todo quedó en un espejismo tras un gran gol de Lasse Schöne tres minutos después de falta directa, al palo largo, al que un Courtois mal situado no pudo llegar.

Al final, 1-4 y el Real Madrid volvió a caer en octavos de final de la Liga de Campeones, algo que no ocurría desde 2010, frente al Olympique de Lyon, y dice adiós a la última bala que le quedaba este año.

Además, con el 0-2 en contra y apenas dos minutos después de retirarse Lucas Vázquez con una lesión muscular, lo hizo Vinícius. El brasileño se lesionó la rodilla tras una carrera y un remate muy forzado y se marchó entre lágrimas.

La caída sin red de un Real Madrid sin referentes, se recrudeció en su competición fetiche. Cayó con estrépito, dilapidó su ventaja de Amsterdam por una profunda depresión que arrasa con todo, incluido con un Solari sentenciado que acelera la construcción de un nuevo proyecto.