El clásico fue azulgrana

El Barça reforzó su liderato en la ACB con un nuevo triunfo en la pista del Madrid, al que le tiene tomada la medida desde la llegada de Pesic al banquillo azulgrana y al que ha vencido en cuatro de los cinco clásicos de este curso (76-82).

De salida, solo hubo un equipo. El Barça anotaba con solvencia e imponía una férrea defensa que ahogaba las acometidas blancas. Los locales acumulaban pérdidas y errores en cada ataque y un triple de Llull fue su único botín hasta el ecuador del primer cuarto (3-13). Pesic optó por parar el partido para frenar la reacción local con un 7-0 y retomar el control, aunque Llull se encargo de nivelar el choque al final del primer acto (17-17).

Randolph cobró la única ventaja blanca de la primera parte nada más empezar el segundo asalto, aunque fue un espejismo porque tuvo la rápida respuesta de un Kuric que tomó las riendas del ataque azulgrana. Llegó el momento de Carroll. Con dos triples y un contraataque, logró nivelar el marcador a 5 minutos del descanso. La respuesta azulgrana no tardó en llegar y lo hizo a través de Smits. El Madrid volvió a la carga y dejó el partido abierto (40-45).

Campazzo aportó la energía necesaria a sus compañeros y los anfitriones fueron capaces de rearmarse por enésima vez y llegar a los últimos diez minutos con vida (57-62). El partido no estaba ni mucho menos cerrado porque el Madrid evitó nuevas escapadas azulgranas. Un triple de Taylor subió el 66-68 al marcador. Llegaron entonces dos nuevos triples visitantes que dieron oxígeno a los de Pesic. A los dos últimos minutos se llegó con el Barça 7 arriba y medio triunfo en el bolsillo y el rey de los clásicos de esta temporada supo sellar su cuarta victoria del curso ante el Madrid.