LO MEJORLO PEOR
Cómodo triunfo
El Força Lleida supera con claridad al Araberri y logra su cuarta victoria consecutiva en el Barris Nord || Mete presión a Valladolid y Huesca en la pelea por estar en los play off
Clara y contudente victoria del ICG Força Lleida ante el Araberri (68-52), en un partido muy cómodo para el equipo de Jorge Serna. Los de negro sumaron así su cuarta victoria seguida en el Barris Nord y la décimoquinta en el cómputo global para seguir aspirando al play off. La presión pasa ahora a Valladolid y Huesca, que si fallan en sus compromisos del fin de semana, se quedarán a tiro de piedra. Además, los oscenses son el próximo rival para un ICG Lleida que sigue soñando con estar entre los grandes.
Salida en tromba del ICG, con un parcial de 8-0, con dos triples de Djuran, que frenó Pierre con la primera canasta para los vitorianos. Sin embargo, los de negro se encontraban muy cómodos, sin apenas oposición y el capitán Feliu se encargó, con otro triple, de establecer el 11-4. Empezaron las rotaciones, buscando dar descanso a los titulares, mientras en el marcador iba subiendo la diferencia. Dos puntos más de Feliu establecieron el 17-6, pero el Araberri fue capaz de dar respuesta con dos triples consecutivos de Kamba. El capitán del Força Lleida, con la mano caliente, le devolvió la moneda y cerró el primer cuarto con el 20-12. Los locales dominaban pero sin alardes.
Los leridanos entraron en el último cuarto con el partido decidido, pero después acabaron relajándose
Cuatro puntos más de Mbaye y Djuran para abrir el segundo cuarto y establecer una máxima renta de 12 (24-12), antes de que Okoroh volviera a frenar el intento local de despegar. Povea pidió tiempo y no hizo más que hacerle un favor a Serna, que no estaba especialmente satisfecho con el rebote. Dos tiros libres de Robinson dieron paso a un parcial de 9-0 con Shaquille demostrando su calidad bajo el aro y la máxima se disparó hasta los 17 puntos (33-16). Nuevo tiempo de Povea, esta vez con razón. El partido entró entonces en una dinámica de intercambio de golpes, con triples de Steel, que nunca había tenido tiros tan cómodos, y Dedovic. A Serna no le gustó el tono del partido y lo detuvo a falta de 53 segundos para el descanso tras otro triple de Robinson (40-26). Quintela tuvo la posibilidad de aumentar la diferencia pero se enredó y se terminó agotando el tiempo de posesión. El ICG Força Lleida estaba teniendo el partido más plácido de la temporada –56-16 en valoración–, pero no podía confiarse, teniendo en cuenta el precedente del encuentro ante el Huesca en el Barris Nord.
Intercambio de errores en la selección de tiro para abrir el tercer cuarto. Minutos en los que ninguno de los dos equipos era capaz de anotar, hasta que Djuran se decidió a acertar. Otra canasta fácil de Stutz y máxima diferencia para los leridanos, que ganaban por 18 puntos (44-26). El técnico visitante paró el encuentro a falta de 6:07 para el final del capítulo. Pero Chapela anotó un triple para situar a su equipo 21 puntos arriba. El Araberri lo intentó situándose en zona, una decisión poco acertada teniendo en cuenta el acierto que estaba teniendo el ICG Lleida, pero los de negro encontraron a Shaquille, en sus mejores minutos del partido. Gracias a cuatro puntos consecutivos del bahameño, la renta se fue hasta los 24 puntos con el 53-29, diferencia que pudo contrarrestar Markovic con dos tiros libres. Shaquille seguía a lo suyo y también Robinson, con un elenco de tiros brutales y fallos estrepitosos. Djukanovic se encargó de cerrar el tercer cuarto con dos tiros libres para el 57-34.
El partido estaba más que sentenciado, pero quedaban diez minutos por delante. Feliu los abrió con la máxima diferencia de 25 puntos (59-34). La relajación, que era el peor de los enemigos para el ICG Lleida en esta fase del encuentro hizo acto de presencia y el Araberri lo aprovechó para ir recortando diferencias ante la pasividad de la defensa leridana. Serna tuvo que pedir su primer tiempo a falta de 4:02 para el final después de cuatro puntos seguidos de Markovic (64-45). Suerte que la cosa no fue a más y que a los visitantes no les quedaba tiempo, porque la imagen del último cuarto fue lo peor del partido, en el que llegaron a debutar los júniors Civera y Benavente.