Despedida cruel del Cadí La Seu

El Cadí La Seu despidió anoche una temporada histórica y extraordinaria en la que ha batido récords, participando por primera vez en la Copa de la Reina, alcanzando las semifinales, y sacando billete para disputar la próxima campaña la Eurocup. Ayer perdió de forma cruel el segundo partido de la eliminatoria del play off de semifinales por el título ante el potente Girona (73-74), desaprovechando la posibilidad de forzar un tercer partido de desempate al fallar Yurena Díaz dos tiros libres con el cronómetro a cero. Solo un acierto, al menos, le hubiera dado a las urgelenses la posibilidad de jugar una prórroga de un partido con alternancias en el marcador, pero en el que nunca perdió la cara el equipo de Bernat Canut llegando a amasar una máxima ventaja de 12 puntosen el segundo cuarto (29-17).

Una vez más el Palau d’Esports de la capital del Alt Urgell respondió a la llamada de su equipo, que le ha deparado una temporada espectacular. La afición, orgullosa del esfuerzo de sus jugadoras, empujó en todo momento al equipo que fue capaz, entre otros logros, de derrotar al mismo Girona durante la fase regular de la Liga.

El partido comenzó con un equipo gerundense mucho más acertado y enchufado. Los primeros minutos reflejaron en el marcador pequeñas ventajas a favor de las visitantes, dirigido de forma inteligente por las veteranos Laia Palau y Núria Martínez. Pero poco a poco las de Bernat Canut fueron asentándose y a falta de poco más de un minuto para finalizar el primer cuarto ya se ponían por delante (16-14), resultado con el que acabaría el parcial.

El equipo de la capital del Alt Urgell se sentía cada vez mejor en la pista con unos minutos espectaculares de la jovencísima Irati Etxarri cogiendo galones. Así, a falta de poco más de cinco minutos para llegar al descanso las locales lograban la máxima diferencia a su favor (29-17).

El Girona, sin embargo, echó mano de sus americanas Hampton y Williams, a veces con segundas opciones de tiro, y logró alcanzar el descanso solo cinco puntos abajo (39-34).

Como había ocurrido al inicio del partido, el Cadí vio cómo su rival intentaba ponerse por delante en el marcador en la reanudación. Pero fue efímero el 45-48 a falta de 6 minutos. Las urgelenses no solo igualaron el marcador 54-54, sino que se plantaron en el último cuarto con ventaja (60-56).

El último parcial tuvo de todo. Emoción, incertidumbre, esperanza para el Cadí y decisiones arbitrales muy discutidas. Las de Bernat Canut dieron el golpe primero con un 65-58 a falta de 7’07” que demostraba la gran competitividad que ha exhibido este equipo durante toda la temporada. Pero el Girona no quería un tercer partido y a falta de 2’16” se colocó con un inquietante 71-74 que obligó a Bernat Canut a solicitar tiempo muerto. El marcador no se movía y a falta de 10 segundos seguía el electrónico mostrando el 71-74 con el que el técnico del Cadí volvía a reunir a sus jugadoras.

Y a partir de aquí se desató la locura y el Cadí rozó la proeza de forzar un tercer partido. Primero fue Irati Etxarri quien anotó dos tiros libres tras una falta antideportiva de Núria Martínez (73-74) y a continuación tras sacar de banda el Cadí era Yurena Díaz, siempre valiente, quien recibía falta entrando a canasta. La canaria, con el cronómetro a cero, tenía en sus manos la posibilidad de ganar el partido o cuando menos forzar la prórroga. Pero ahí le tembló la mano a la brava jugadora que no pudo anotar ninguno de los dos tiros libres. Las jugadoras del Girona explotaban de alegría en la pista y las del Cadí La Seu recibían la ovación más grande que se recuerda en el Palau d’Esports. El público, puesto en pie, agradeció entre lágrimas la gran temporada de sus jugadoras que muchos minutos después de acabar el partido aún veían cómo las gradas seguían llenas. Un diez para equipo y afición.