CICLISMO DESAFÍOS
Un Everest en Tremp
“No es una actividad sana ni recomendable para el cuerpo, pero la felicidad y la plenitud emocional que te produce el reto te da salud”. Es la reflexión que hace David Riba, un médico de familia de Tremp de 46 años, que completó el pasado martes el desafío que se conoce como ‘Everesting’ al ascender en bicicleta 20 veces el puerto de Santa Engràcia (6,7 km y 440 metros de desnivel positivo) y acumular en una sola sesión el desnivel positivo de la cima más alta del mundo (8.848 metros). Comenzó a las 5.00 de la mañana y culminó su reto a la 1.30 de la madrugada. En total, unas 20 horas y media de actividad parando cada vez que ascendía para avituallarse.
Las reglas de esta práctica deportiva son simples y fue George Mallory, nieto del mítico alpinista del mismo nombre que desapareció en 1924 intentando ascender la cumbre más alta del mundo, quien la denominó ‘Everesting’. Solo hay que subir las veces que sea necesario por la ruta elegida y bajar por la misma vertiente. Se puede ir solo o acompañado, en bicicleta o a pie.
David Riba, un especialista en deportes de larga distancia tanto a pie como en bicicleta, se propuso afrontar este reto por varios motivos. “Encontré la motivación porque me sirve de preparación para correr la París-Brest-París, una prueba ciclista de 1.200 km que se celebra en agosto cada cuatro años y también porque este es un reto que encuentras en la red y apetece hacerlo. Hay incluso una web en la que puedes acreditar que lo has hecho y hay quien, en una sola sesión, hace el ‘Everesting’ multiplicado por dos y por tres”, explica este deportista que se entrena entre 10 y 15 horas semanales y que no estuvo solo en el reto. “Cuando lo comenté a amigos y conocidos quisieron acompañarme y esto fue lo más reconfortante del reto. Hubo quien subió diez veces el puerto. Entre todos los que participaron subimos el Everest cinco veces”, subraya.