FÚTBOL SEGUNDA DIVISIÓN B
El estage del Lleida en Garòs será del 21 al 26 de julio
La etapa Molo comenzará en el Lleida Esportiu el próximo 15 de julio, fecha en la que se ha citado a los jugadores y en la que darán comienzo las revisiones médicas, que se prolongarán a lo largo de tres días. El equipo también ha cerrado el estage en la Val d’Aran y trabajará en Garòs entre el 21 y el 26.
Tras la presentación la pasada semana de Manuel Jesús Casas “Molo”, nuevo entrenador del Lleida, el club ya ha empezado a cerrar aspectos de la próxima temporada, que dará comienzo el lunes 15 de julio. Los jugadores, por grupos, se someterán a las pertinentes revisiones médicas entre el 15 y el 17 y, a partir del jueves 18, comenzarán los entrenamientos. El primero será en el Camp d’Esports y tanto el jueves como el viernes 19, la plantilla trabajará en doble sesión. A esta primera semana de trabajo el club convocará a los jugadores de la primera plantilla, actualmente 15, además de futbolistas del Lleida B que harán la pretemporada con el primer equipo.
Después de descansar el sábado día 20, el domingo 21 se dirigirán hacia la localidad aranesa de Garòs, en cuyo terreno de juego trabajarán hasta el viernes 26, jornada tras la que regresarán a Lleida. Durante la estancia en la Val d’Aran, probablemente el jueves, día 25, disputarán el primer amistoso de pretemporada, bien ante una selección de jugadores araneses o ante un equipo francés.
Molo, aunque está de vacaciones en Almería, mantiene contacto permanente con el director deportivo, Jordi Esteve. El presidente, Albert Esteve, tiene previsto desplazarse a Almería a finales de semana para reunirse con el técnico. Molo tiene previsto incorporar al cuerpo técnico a un segundo entrenador de su confianza, lo que supondrá modificaciones en el staff, en el que Jordi Cortés deberá cambiar de rol, ya que era el segundo de Gerard Albadalejo, aunque ya dejó de serlo con la llegada de Joan Carles Oliva.
Por otra parte, el equipo Juvenil hizo la pasada semana una sesión de trabajo monitorizada. Cada jugador llevaba un chaleco desarrollado por la empresa Wimu Realtrack, que analiza el trabajo que están haciendo los jugadores, información de gran valor para los técnicos.