“Es un sueño tener en Sort un estadio de freestyle así”

“Es un sueño tener en Sort un estadio de freestyle así y hay que alabar el esfuerzo que ha supuesto hacer una obra de esta importancia, pero tenemos que seguir trabajando, conseguir hacer un segundo rulo e integrarlo con el exterior y con la zona verde para que los visitantes lo puedan disfrutar”. Quien habla maravillado de la flamante instalación que acoge el Mundial de estilo libre o freestyle en el río Noguera Pallaresa es el experimentado palista de Sort que, a la vez, es seleccionador estatal, Oriol Colomé.

En declaraciones a este diario, aprovechando la jornada de entrenamientos de ayer antes de que se reanude hoy la competición, Colomé destacó del campo de regatas “una zona fija en el exterior que nos permite tener gradas y carpas para el público. Y después está el rulo en el que hemos conseguido fijar las piezas para que no se mueva aunque baje mucho caudal de agua”. Varios palistas, en especial él y el vasco Gorka Goikoetxea, trabajaron codo con codo con el ingeniero para que sea una instalación que ha recibido grandes elogios. “En el último mes hemos buscado que tuviese más profundidad, un retorno más bueno, mejorar también la velocidad...Dicho esto habrá que hacer un mantenimiento anual de la instalación”, explicó Colomé.

Sobre el equipo estatal, donde hay mayoría de leridanos, Colomé cree que las posibilidades de medalla se centran, sobre todo, en el gerundense Quim Fontané para revalidar el título mundial en K1, y en júniors damas con las palistas del Kayak Sort, Ona Baró, Arboló Rafel y Sílvia Gallego. En séniors, aparte del gran favorito Fontané, ve a Adrià Boix, del Salt Ter, entre los cinco primeros, y a Kira Carreto, Ian Salvat y Adrià Ovando en el Top 20. En júniors hombre, su pronóstico es que Unai Silva puede colarse entre los diez primeros.

Sobre las aspiraciones olímpicas del estilo libre, Oriol Colomé cree que se está en el buen camino. “Se está trabajando en hacer las mejoras que se necesitan como ya se ha visto en los últimos mundiales. Por un lado, sería algo muy positivo porque habría más medios, pero al ser las plazas olímpicas más restringidas hay el peligro de que aún fuera más minoritaria”.