La Transfronterera pasa a ser nocturna en su séptima edición

La Travessa Transfronterera entre La Seu d’Urgell y Sant Julià de Lòria, en Andorra, alcanzará este año su séptima edición adelantando un mes su celebración y conviertiéndose en una carrera nocturna. La cita, que sigue el Camí de Retrobament, una vía que une el Alt Urgell, Andorra y L’Ariège (Francia) y que recupera caminos antiguos para desplazarse por el territorio de los Pirineos, se disputará el 14 de septiembre y busca que este cambio a nocturna sirva como “atractivo para superar el número de participantes” de la edición pasada, que se quedó a las puertas de alcanzar los 300 atletas. El concejal de Deportes del ayuntamiento de La Seu, Carlos Guàrdia, destacó ayer durante la presentación otras dos novedades del evento relacionadas con la sostenibilidad. Los participantes de la Transfronterera deberán llevar un vaso para utilizar en los avituallamientos o podrán utilizar el que entregará la organización previo depósito de una fianza. Además, las cintas que marcarán el recorrido serán reutilizables y contarán con elementos reflectantes. El director del servicio de Deportes de La Seu, David Vallvé, explicó durante la presentación algunos de los detalles de la carrera, que mantiene los dos recorridos de 28,6 kilómetros y 2.491 metros de desnivel acumulado, con inicio en la zona deportiva de La Seu a las 19.00, y un segundo de 16,1 kilómetros, desnivel acumulado de 1.256 metros y salida desde Bescarán (Les Valls de Valira) a las 20.00. La inscripción tiene un coste de 15 euros hasta el 12 de septiembre y tendrá como obsequio una camiseta. Las inscripciones de última hora el día de la carrera costarán 20 euros. La prueba continúa siendo puntuable para el Circuit Fer.