MOTOCICLISMO GRAN PREMIO DE TAILANDIA
Màrquez sale ileso de una espectacular caída
Marc Màrquez dio ayer el susto en la primera sesión de entrenamientos libres del Gran Premio de Tailandia al protagonizar una espectacular caída que le hizo pasar por el hospital, aunque pudo volver a rodar en la segunda tanda y terminar con el sexto mejor crono (1:30.891).
En la curva 7 del Chang International Circuit, a falta de seis minutos para el cierre de una FP1 que el leridano lideraba con un crono de 1:31.187, y en su vuelta de salida de boxes, el de Cervera se fue al suelo al perder el control de su moto en el tren trasero y salió disparado por delante de su Honda RC213V, que dio varias vueltas de campana y quedó totalmente destrozada. La caída fue fea y dura, tanto que hizo temer que el leridano sufriera algo grave cuando se quedó en el suelo sobre la gravilla que sigue a la escapatoria de cemento por la que se deslizó. Se quedó a gatas en el suelo, recuperando el aire que le faltaba después del impacto pero, con ayuda de los stewards, se puso en pie y fue recuperando las fuerzas. En el centro médico del circuito, tras comprobar que a nivel pulmonar y de oxígeno todo estaba correcto, optaron por llevarlo a un centro hospitalario de Buriram en el que se sometió a una resonancia que descartó cualquier tipo de lesión, pero confirmó contusiones en la espalda, pierna y cadera. Los mecánicos de Repsol Honda no pudieron arreglar su moto para la FP2, pero Màrquez, en cambio, hizo una ‘chapa y pintura’ rápida para poder salir en la segunda tanda y, a los tres minutos, marcar un crono de 1:30.891 con el que demostró estar recuperado y listo para intentar conquistar su sexto Mundial de MotoGP en Tailandia, para lo que necesita ganar o sumar dos puntos más que Andrea Dovizioso (Ducati).
El leridano señaló que “lo importante es que estoy bien, siento un poco de dolor, pero nada más”
En el global de la jornada, el francés Fabio Quartararo fue el más rápido. Firmó un 1:30.404 con el que superó a Maverick Viñales, segundo y el más rápido en la FP1, y a su compañero de equipo, Franco Morbidelli, que terminó en tercera posición.
El piloto de Cervera abroncó al director médico por mandarle al hospital Marc Márquez no sufrió ningún tipo de lesión tras su aparatosa caída y el director médico de la competición, Ángel Charte, reconoció después que el leridano le echó “una bronca de cojones” por mandarle al hospital de Buriram. “Ha sufrido una caída importante, aparatosa, y lo que nos ha sorprendido inicialmente de la caída es que cuando eso sucede suele ser un piloto que se levanta rápido, y en este caso no se levantaba y había una causa para ello, le faltaba la respiración, le costaba mucho ventilar a nivel de inspiración”, explicó el traumatólogo. “Al llegar al centro médico lo hemos monitorizado y hemos visto que estaba más recuperado del flujo cardíaco y respiratorio, ciento por ciento estable, aunque con dolor en la zona lumbo-sacra, en la zona glúteo derecha y en la zona tibial izquierda, con un pequeño abombamiento”, añadió Charte. Mientras, el piloto manifestó que “hemos empezado el día rápidos, pero en la última salida a pista del FP1 he tenido una dura caída. Me sentía bien cuando he llegado al centro médico, pero hemos seguido el protocolo del doctor y me han llevado al hospital para un chequeo. Lo más importante es que estoy bien. Siento un poco de dolor, pero nada más. Por la tarde he podido pilotar y estoy contento con lo que hemos logrado. Solo hemos tenido que modificar nuestro plan ligeramente, pero he sido capaz de ser rápido inmediatamente”, añadió.