Contra la sentencia

La sentencia del procés desencadenó todo un torrente de reacciones en el deporte catalán. Los más contundentes fueron, sobre todo, el Lleida Esportiu pidiendo “libertad para los presos políticos” (publicó en redes sociales el cartel reivindicativo de la Crida y Òmnium) y el FC Barcelona (que fue el primer club catalán en emitir un comunicado) que en su escrito oficial considera que “la prisión no es la solución”, argumentando que “del mismo modo que la prisión preventiva no ayudó a resolver el conflicto, tampoco lo hará la prisión”. El club azulgrana añadió que la resolución del conflicto que vive Catalunya pasa “exclusivamente por el diálogo político”. En este sentido, Gerard Piqué se alineó con la postura del Barça asegurando que está “orgulloso de formar parte de este club”. En clave Barça, también se pronunció el excapitán azulgrana Xavi Hernández que expresó su postura en Instagram: “Vergüenza”, dijo, incluyendo debajo los años de prisión de todos los líderes políticos y sociales condenados. Y la futbolista Alexia Putellas, que aseguró que la sentencia no es la solución y pidió “¡soluciones políticas ya!”.

Un buen número de clubes leridanos expresaron su opinión a través de comunicados o escritos en las redes sociales. El Sedis Bàsquet expresó “su rechazo a la sentencia” porque el club de La Seu considera que “se han menospreciado los valores democráticos y de diálogo que caracterizan a nuestro país, al tiempo que mostró su solidaridad con los procesados y sus familias. Con mayor tibieza se expresaron el Força Lleida y el Lleida Llista (ver desglose) quienes coincidieron en que “el club es una entidad puramente deportiva e integrada por personas con múltiples sensibilidades”, añadiendo que “más allá de respetar la decisión judicial” lamentan “el sufrimiento de las personas procesadas y de sus familias”, finalizando en animar “a buscar soluciones políticas y democráticas siempre por la vía del diálogo”. Un discurso, por cierto, casi calcado del que hizo el RCD Espanyol. Del resto de capitales catalanas, el Girona FC fue muy contundente al mostrar su “rechazo a la sentencia” y pidiendo “diálogo sin condiciones” que incluya “la liberación de los líderes cívicos y políticos condenados y encarcelados injustamente”.

Fue el primero en lanzar un comunicado diciendo que “la solución pasa de forma exclusiva por dialogar”

Las federaciones catalanas suspendieron en su mayoría sus actividades y les secundaron los clubes

Por su parte, las federaciones catalanas suspendieron sus actividades y los clubes, también en su mayoría, secundaron el paro. La de fútbol justificó la anulación de actividad “en solidaridad con los políticos y actores sociales catalanes condenados y sus familias”. Desde el Lleida Esportiu hasta los clubes más modestos leridanos suspendieron sus entrenamientos y el FC Borges secundó al club de la capital del Segrià al pedir también “la liberación de los presos políticos”.

La Plataforma Pro Seleccions Esportives Catalanes instó a los clubes a adherirse a la iniciativa ‘Marxes per a la Llibertat’, y la Unió de Federacions Esportives Catalanes (UFEC) se sumó al manifiesto de sindicatos y entitades de la sociedad civil de Catalunya.

Hubo deportistas que también expresaron su opinión a nivel individual como el exjugador y expresidente del Joventut, Jordi Villacampa: “Esto no va de ser independentista o no. Todo mi apoyo a los presos políticos y sus familias”. El club verdinegro no se pronunció. El jugador del Força Lleida, Miki Feliu, dijo en Twitter: “Si eres neutral en situaciones de injusticia, has elegido el bando opresor”. La alpinista leridana Araceli Segarra escribió: “Mezquindad.Vergüenza democrática”. Entrenadores de baloncesto como Salva Maldonado (“Sentimiento español no he tenido nunca. En los últimos años me siento mucho más catalán”) y Alfred Julbe (“Visca Catalunya lliure. Nunca más españoles”).