Suspenden el partido del Tàrrega por amenazas al árbitro

El partido entre el Tàrrega y el Vista Alegre fue suspendido por el árbitro en el minuto 70 cuando el marcador señalaba 1-2. El colegiado decretó el final anticipado del encuentro porque, según reflejó en el acta, le estaban amenazando desde el público y le intentaron agredir algunos jugadores locales. Sin embargo, el Tàrrega no ve motivos para la suspensión y dice que solo le abuchearon por su actuación. Expulsó al delegado del Tàrrega por no hacer callar a la gente y al entrenador, Edu Berrocal, por protestarle una dura entrada de un jugador visitante a Omar, sin que Cartiel Arasa señalara falta.

Todo un cúmulo de circunstancias que le superaron y, presuntamente, por esto suspendió el partido, porque ninguna otra cosa podía ser motivo de suspensión. Antes ya habían sucedido más cosas, como un penalti señalado en el área visitante al minuto 15 por unas manos clarísimas, una acción que fue muy protestada. Esto fue el inicio de un cúmulo de desaciertos que, poco a poco, le hicieron perder los papeles hasta la suspensión del choque.

Por lo que al partido respecta, el Tàrrega se adelantó con un gol de Omar en el minuto 22, que fue neutralizado por el Vista Alegre diez minutos después tras una pérdida en ataque del equipo azulgrana. Tras la reanudación, el Tàrrega siguió sin reaccionar, pese a que Vargas en el minuto 50 tuvo una gran oportunidad para ello. A continuación, volvió la polémica. El colegiado señaló penalti en contra del Tàrrega tras el forcejeo entre un defensa y un atacante y supuso el 1-2.

Antes de que Cartiel Arasa decretara el final hubo un baile de tarjetas al banquillo local, del que expulsó al delegado, al entrenador y al portero suplente.

El Tàrrega presentará recurso contra el acta arbitral

“El partido ha tenido que ser suspendido debido a que tras la alta tensión que había tanto en la zona de aficionados como en el terreno de juego, no se podía garantizar la seguridad y la fluidez en el encuentro, además de que esta tensión pudiera perjudicar sobre mis decisiones ya que emocionalmente no me encontraba dispuesto”. Así justificaba el árbitro en el acta la suspensión tras reflejar gritos y amenazas que le profirió el público como “no vas a salir vivo de aquí” y pancartas en las que, según él, se leía: “FCF Mafia” en referencia a la Federación Catalana.