Un homenaje al voleibol en Almacelles
El ayuntamiento colocará una escultura de hierro en recuerdo a Pau Pujol, el maestro que introdujo este deporte en la localidad y lo llevó a los mayores éxitos a nivel estatal
Cerca del abandonado colegio San Antonio, donde surgió el embrión del voleibol en Almacelles, el ayuntamiento tiene previsto construir un nuevo pabellón polideportivo. Y justo delante de la instalación deportiva colocará una estatua que rendirá homenaje a los héroes de este deporte en la localidad y, más en concreto, a Pau Pujol, un joven maestro del colegio que fue el promotor y alma mater. La escultura, obra del artista argentino Miguel Ángel González, servirá para que se recuerde a un forjador de campeones como fue Pau Pujol. “En Almacelles tenemos un monumento recordando que llegó aquí una etapa de la Volta a Catalunya, pero a partir de ahora también recordaremos aquellas gestas del voleibol”, dice el alcalde Josep Ibarz. Recuerda como hace dos años, a través de un programa de televisión, se rememoró la rúa de celebración del doble campeonato de España cadete e infantil que consiguió el colegio San Antonio. Allí se dieron cita de nuevo los Zazurca, Cortés, Baltasar, Barrios, Vidal, Soto e incluso la viuda de Pau Pujol. También sonó la misma sirena con la que les recibió la población de Almacelles en 1976 y que solo suena en horas determinadas. La historia de esta sirena se remonta a la Guerra Civil cuando fueron destruidas las campanas de la iglesia y reemplazó el sonido de estas. Luego se recuperaron las campanas pero la sirena continuó formando parte de la vida cotidiana de los almacellenses. “Gran parte de nuestro éxito era el gran fondo físico que teníamos ya que Pau Pujol nos inscribía a todas las competiciones de cross que se disputaban y este detalle marcaba la diferencia con los rivales. Además, como estábamos acostumbrados a jugar en suelo de tierra, cuando los rivales venían a nuestra pista no se atrevían a lanzarse para salvar el punto”, recuerdan los miembros de aquellos equipos.