LOS DETALLES
El Llista se reengancha
Albert Folguera estaba ayer feliz por haber roto de una vez por todas la mala racha. “Todos teníamos claro que lo importante eran los tres puntos. Nos hemos sacado un peso de encima, ahora estamos más tranquilos. Se ha visto durante el partido que ha habido muchos nervios, mucha precipitación, pero también es cierto que hemos dejado la portería a cero ante un equipo que ha buscado el gol hasta el final”, indicó el técnico, que lanzó un mensaje a sus jugadores. “Tenemos que darnos cuenta de lo que realmente somos. Antes ibas con un Audi y ahora vas con un Citroën, te llevará a todos los sitios, pero no es lo mismo. Las prestaciones no son las mismas. Es una metáfora, pero es una realidad. Lo hacemos bien, pero no somos lo que éramos. Cuando queremos hacer cosas que no podemos es cuando nos equivocamos”, dijo.
Para Folguera, la victoria de ayer “tiene que ser un punto de inflexión”, dijo pensando en lo que viene, especialmente el duelo del sábado en la pista del Barcelos portugués. “Es un equipo con mucho gol y con jugadores buenísimos. Si salimos vivos y convencidos de allí, y no hablo de resultado, será muy positivo para el equipo, pero si no lo afrontamos como debemos será un lastre que nos machará”, apuntó Folguera, que habló de la Copa. “Si no estamos será porque no lo merecemos, pero lo lucharemos hasta el final”.
Había que ganar, de la manera que fuese, y se ganó. Por fin el Llista pudo romper su sequía para reencontrarse con la victoria después de encadenar cuatro derrotas, justo la semana antes que debe poner en juego su corona europea en la pista del Barcelos. Los de Albert Folguera, que recuperaban a Mauro Giulini tras dos partidos de baja por lesión y con Gefflot jugando con una máscara protectora por la fisura que tiene en la nariz, tuvieron que sufrir hasta el último suspiro para sumar su cuarta victoria de la temporada y situarse a tan solo un punto del Calafell, su próximo rival en Liga y que marca la clasificación para la Copa del Rey, una lucha que, gracias al triunfo de ayer, sigue abierta de par en par para los leridanos.
El partido comenzó con un ritmo frenético, con constantes idas y venidas en ambas porterías que hicieron lucirse a los dos porteros. Cañellas, en jugada personal, fue el primero en probar fortuna, en el mismo minuto en el que Àlex Joseph, que salía de titular en lugar de Gefflot, estuvo cerca de batir a Luzón. Ruiz puso la réplica poco después pero Lluís Tomàs respondió a la perfección y, segundos después, una contra de Oriol Vives acabó con la bola dentro de la portería después de un potente disparo del igualadino. El gol, a la postre decisivo, a los tres minutos de juego no hizo variar la dinámica del duelo.
Joseph tuvo el segundo en un par de acciones, al igual que Vives en otro disparo lejano, pero el Palafrutell, que llegaba al Onze de Setembre empatado a puntos con los leridanos, también tuvo ocasiones para empatar, pero se topó en todas ellas con el meta pallarés. La más clara de los listados en los primeros 25 minutos la tuvo Cañellas, que remató alto un rechace de Luzón tras un fortísimo disparo de Marc Palazón, que había entrado en pista segundos antes. Vives también tuvo el segundo en sus manos tras un servicio de Andreu Tomàs hacia Giuliani y asistencia del argentino para que el ayer goleador se topara de nuevo con el meta rival.
A la vuelta de los vestuarios el partido no cambió. Continuó el juego frenético, pero plagado de imprecisiones fruto de los nervios en dos equipos que estaban muy necesitados de una victoria. Tras un intercambio de golpes, Vives la volvió a tener, pero esta vez fue el palo quien impidió el segundo tanto de los listados que, por cantidad y calidad de ocasiones se merecían ir ganando, al menos, por 2-0.
La más clara para los locales llegó en una falta directa que provocó Giuliani y que le costó la tarjeta azul al gerundense Pol Vives. El argentino fue el encargado de ejecutar la pena pero no acertó a batir a Luzón. Los listados tampoco aprovecharon la inferioridad del rival en los dos minutos posteriores. Es más, el Palafrutell estuvo a punto de empatar antes de recuperar al jugador excluido, pero Lluís Tomàs volvió a estar providencial para evitar el gol en dos disparos seguidos, el último a bocajarro.
El Llista logró marcar el segundo a ocho minutos del final del partido, pero los colegiados lo anularon porque Palazón se ayudó del patín para introducir la bola en la portería. En la jugada posterior, y en pleno desconcierto leridano, el cuadro gerundense volvió a rozar el empate, pero el meta listado volvió a salvar a los suyos. Faltando poco menos de un minuto, el Palafrugell se la jugó y sacó a su portero para poder atacar con cinco jugadores de pista, pero el Llista anguantó bien la presión, no sin algún sobresalto, y acabar logrando una victoria balsàmica que le da tranquilidad antes de afrontar este sábado su debut en la WS Europe Cup en la pista del Barcelos portugués, toda una prueba de fuego para el vigente campeón, que el martes siguiente tendrá otro examen en la pista del Calafell, al que tiene ahora a un solo punto.