DEPORTES
Eliminación cruel
El Lleida da una buena imagen ante un efectivo Espanyol, que marcó por mediación del chino Wu Lei en sus dos únicos remates entre los tres palos || Floja entrada en el estadio
De la famosa expresión “tortura china” se desconoce su origen en concreto, pero lo más seguro es que la gran crueldad y fama de las torturas en el país asiático terminaron siendo una expresión. Algo parecido sufrió anoche el Lleida ante un Camp d’Esports desangelado y en medio de la lluvia que cayó ya avanzado el encuentro. El “torturador” fue Wu Lei, el crack chino que llegó al Espanyol tras ser una estrella en su país y Bota de Oro de la Superliga china durante cinco temporadas, quien tuvo suficiente con dos zarpazos al inicio de la segunda parte y en los últimos instantes del partido, para finiquitar la eliminatoria.
La Copa de esta temporada, con un formato renovado y muy atractivo para los equipos modestos, no llegó en buen momento ni para Lleida ni para Espanyol. El colista de Primera demostró todos los tics de un equipo presa de la ansiedad, falto de ritmo y con muchas inseguridades. Cierto es que jugaron varios jóvenes y futbolistas menos habituales porque es ahora mismo la Liga lo único que les ocupa y preocupa a los de Pablo Machín, pero la primera parte del equipo blanquiazul fue deprimente. Si el Espanyol atraviesa problemas en la Liga, el Lleida –aunque no de tanta gravedad– tampoco anda como para tirar cohetes tras sumar cinco jornadas sin ganar y haber caído de los puestos de play off. Molo, como su colega Machín, tiró de varios jóvenes, pero también es cierto que entre las bajas obligadas que tiene tampoco podía reservar demasiados efectivos para el inminente partido en Sabadell de mañana.
Así las cosas, el equipo leridano fue mejor en la primera parte y en la recta final de la segunda. El Espanyol se limitó a ser más efectivo. Dos remates entre los tres palos en todo el partido, dos goles. Máximo castigo imposible. Wu Lei, en el minuto 52, sacó petróleo de un gran pase en profundidad del argentino Piatti y ante la media salida de Víctor Vidal le batió por bajo en el primer palo. Y en el 90, el delantero chino se sacó de la manga un remate cruzado que sorprendió a toda la defensa leridana y a Víctor para establecer el 0-2. Y estuvo a punto de lograr un ‘hat trick’, pero su galopada en el tiempo añadido se perdió fuera.
El Lleida se despidió de la Copa, pero dejó buenos momentos. La presión que ejerció sobre el Espanyol en la primera mitad impidió a los barceloneses que fluyera su juego y, al final, cuando el resultado era de 0-1, buscó el empate con ahínco con dos posibles penaltis incluidos que no pitó el controvertido y mediático árbitro valenciano Mateu Lahoz. También dejó detalles de su calidad Fernando Cano, con ruleta a lo Zidane incluida, al que necesita mucho el Lleida para resurgir en la Liga. La defensa azul rayó a buen nivel, con mención especial a Joan Oriol, y los cambios de ritmo de Liberto en los minutos que jugó fueron de lo mejor de un encuentro en el que el Lleida fue un digno rival para el colista de Primera. En China seguro que se lo pasaron en grande viendo por tv a dos compatriotas en un partido de la competición española. Wu Lei, su estrella, además marcó y en el Lleida se alineó Liu Yang, como ya ocurriera hace 2 temporadas con Cheng ante el Atlético.