LOS DETALLES
Recobran el pulso
El Lleida abre el año con un triunfo ante el Castellón, con lo que pone fin a una racha de seis jornadas sin ganar || Eder marcó de penalti el gol de la victoria en el minuto 43
El Lleida no pudo comenzar mejor el 2020. Firmó una victoria (1-0) ante el Castellón, que llegaba al Camp d’Esports como segundo clasificado, lo que le permite recobrar el pulso y romper con las malas estadísticas que arrastraba en las últimas jornadas. Se reencontró así con la victoria, tras seis partidos sin hacerlo (la última se produjo ante el Orihuela, el 10 de noviembre); vio portería de nuevo tras cuatro encuentros sin marcar (el último gol fue ante el Barça B el 24 de noviembre) y, finalmente, volvió a ganar en casa tras dos empates consecutivos ante el filial azulgrana y el Ebro. La de ayer no fue una victoria fácil porque el Castellón, aunque no se prodigó demasiado en ataque, sí que impuso su ley en el primer tiempo. El Lleida no encontraba el ritmo necesario para superar el entramado defensivo castellonense, que comenzó con una agresiva presión arriba (dos tarjetas en los primeros diez minutos para dos delanteros visitantes), que impedía maniobrar a los de Molo, que llegaban con cuentagotas a los dominios de Álvaro Campos. Un remate desviado de Simic (12’) a la salida de un córner y una excelente jugada personal de Eneko (33’), cuyo centro desde la línea de fondo no encontró rematador, fue todo el peligro que pudo hacer el Lleida. No obstante, encarriló el partido al filo del descanso gracias a un penalti cometido por Calavera sobre Abel y que un especialmente motivado Eder Díez no desaprovechó.
El segundo tiempo, en cambio, fue otra cosa. El Lleida salió aleccionado del vestuario, presionó más y mejor disfrutando de tres claras ocasiones en los primeros cinco minutos de la reanudación. Eder, tras una gran jugada de Liberto con mejor centro, obligó a lucirse a Álvaro Campos (47’) y Abel Molinero, muy activo todo el partido, tuvo dos de consecutivas. La primera (48’) la detuvo Campos y la segunda (49’) se fue fuera tras una buena combinación entre Joanet y Eder. Al Castellón, a diferencia del primer tiempo, le costaba muchísimo salir y más aún superar la ordenada defensa azul. Víctor (17’) remató desviado y el árbitro anuló un gol a Calavera (61’) por fuera de juego. El mismo jugador fue expulsado poco después (68’) al ver su segunda amarilla, lo que disminuyó aún más el poder creativo castellonense.
El Lleida, aunque a ráfagas, siguió creando peligro ante el portal visitante. Abel Molinero (55’) volvió a intentarlo pero su tiro rebotó en el cuerpo de un defensor castellonense, saliendo a córner. Joan Oriol (70’) lanzó con intención una falta directa pero se fue por encima del larguero; Abel Molinero (71’)no acertó a rematar una buena combinación entre Liberto y Eder y Eneko (75’) lo probó desde lejos, pero blocó atento el portero visitante.
En el tramo final del partido, el Castellón sacó toda la artillería que tenía en el banquillo pero, salvo en un remate de César Díaz (72’) que detuvo sin problemas Pau Torres, no hizo temer por el resultado. De todos modos, un córner en el segundo minuto de los tres que añadió el colegiado hizo aflorar los fantasmas que perseguían a los de Molo en los últimos partidos. Pero esta vez se lanzó sin consecuencias y los puntos se quedaron en casa.