Betriu logra entrar en el Top 20 y Esteve se descuelga

Cara y cruz para los dos leridanos que quedan en el Dakar. Mientras Jaume Betriu sigue escalando posiciones y ayer entró por primera vez en el Top 20 de motos, Isidre Esteve sufrió un calvario para llegar a la meta, después de una etapa plagada de accidentes y averías que casi le obligan a abandonar.

Al piloto de Coll de Nargó, que afronta su primera aventura dakariana, le está yendo a las mil maravillas su táctica y ayer, sin arriesgar demasiado, firmó la decimocuarta posición, a 15 minutos y 21 segundos del australiano Toby Price, con lo que ascendió otras cuatro posiciones para situarse decimonoveno, a dos horas del líder, el estadounidense Ricky Brabec. “Estoy muy contento de cómo está yendo todo. Estoy aprendiendo, intentando no cometer muchos errores de navegación, aunque hay ocasiones en que me pierdo, pero de momento el plan es este, ir día a día, con un buen ritmo pero sin forzar mucho porque tampoco tengo la experiencia suficiente para hacerlo, y si tengo que aflojar, aflojaré”, señaló ayer Betriu a SEGRE.

Esteve fue ayer la cruz. Después de que una penalización de 40 minutos recibida el miércoles por un waypoint que, desafortunadamente, no quedó registrado en su GPS, ayer el piloto de Oliana estuvo cerca del adiós. Primero salvó un vuelco ‘in extremis’ y, tras reincorporarse a la carrera, tuvo un problema con la correa del alternador. Por suerte, Cristina Gutiérrez y Pablo Huete les dieron la pieza para seguir en carrera. “Nos han hecho un favor increíble, porque sin su ayuda no hubiéramos podido llegar al final. Les estoy muy agradecido, tanto a ellos como a los holandeses del equipo Bastion. Son dos ejemplos del auténtico espíritu dakariano”, destacó el leridano, que ayer perdió más de dos horas y ahora ocupa el puesto 36 de la general. La victoria parcial fue para Carlos Sainz, que le sacó casi tres minutos a Nasser Al Attiyah (Toyota) y seis al francés Stéphane Peterhansel.