DEPORTES
Adiós con honor
El Llista, campeón de Europa los dos últimos años, se despide de su torneo ‘fetiche’ al no poder remontar el 5-1 de la ida || Los listados, que volvieron a adelantarse como en Portugal, dan una gran imagen ante el favorito al título y logran un meritorio empate
El Lleida Llista se despidió ayer de su torneo fetiche, la WS Europe Cup, antes Copa CERS, que ha conquistado las dos últimas temporadas, con la cabeza muy alta, después de ceder un empate ante uno de los máximos favoritos a sucederle en el trono, un Barcelos que tuvo suficiente con controlar el partido y la clara ventaja que traía de la ida (5-1). Para los de Albert Folguera era casi una misión imposible, pero sus jugadores demostraron su condición de vigentes campeones y nunca se dieron por vencidos.
El Barcelos, pese a la cómoda renta que traía de la ida, salió lanzado y suyos fueron los dos primeros minutos, aunque sin inquietar lo más mínimo la portería defendida por Lluís Tomàs. A partir de ahí, el Llista se sacó el dominio portugués de encima y empezó a poner cerco la meta de Ricardo Silva, aunque tampoco gozó de oportunidades dignas de mención. Había mucho respeto entre ambos contendientes y eso se tradujo en unos primeros diez minutos bastante anodinos.
Los canteranos Duch y Folguera debutaron en el torneo, aunque el primero ya jugó la Continental Cup
Igual que ocurrió en Portugal, el Llista inauguró el marcador con un tanto de Oriol Vives
Un disparo de Andreu Tomàs que salió alto y otro de Luis Querido desde pista portuguesa, que apunto estuvo de sorprender a Lluís Tomàs, fueron las únicas ocasiones claras antes de que el capitán listado abriese el marcador. Fue un lanzamiento bombeado sobre la meta de Silva que, tapado por varios jugadores, no vio la bola y esta, tras dar en el travesaño, fue introducida en la portería por Oriol Vives. Corría el minuto 14 y el Llista había logrado el primer objetivo: ponerse en ventaja, aunque quedaban todavía tres goles más para, al menos, igualar la eliminatoria.
El tanto dejó algo tocado al Barcelos, que pudo haber encajado el segundo en otro disparo de Palazón desde media distancia que Silva detuvo. En el contragolpe posterior, Alvaro Morais era derribado cuando encaraba a Lluís Tomàs y los colegiados señalaban una falta directa. El mismo jugador la ejecutaba pero el meta pallarés acertó a desbaratar la jugada. De ahí hasta el descanso, mucho control por ambos bandos y una única ocasión listada en las manos de Jefflot, que en el último segundo de la primera parte lanzó a la media vuelta y Silva respondió perfectamente.
El Llista había logrado más que en la ida. Allí, hace un mes, también se adelantó en el marcador, pero ayer llegó con ventaja al intermedio e incluso pudo incrementar su cuenta nada más volver de los vestuarios, pero el disparo duro de Palazón lo repelió, no sin apuros, Silva. Y del posible 2-0 se pasó al empate, obra de ‘Alvarinho’ Morais en una gran jugada personal. El luso condujo de portería a portería y cuando llegó a la altura de Lluís Tomàs, le levantó sutilmente la bola para restablecer la igualada (1-1, min.28).
El Llista no se vino abajo con el gol y volvió a tomar el mando ofensivo. Cañellas lo probó desde lejos y luego Vives, en dos ocasiones, puso a prueba al meta portugués sin fortuna. Sí la tuvo el Barcelos, que se encontró con la décima falta de los leridanos, que permitió a Franco Ferrucclio poner por delante los portugueses con algo de fortuna, ya que inicialmente erró en su primer intento de batir a Lluís Tomàs, pero no falló luego al recoger el rechace y, casi sin ángulo, batir al meta pallarés (1-2, m.42). La ventaja apenas duró unos segundos, ya que el Barcelos también cometió la décima falta y Andreu Tomàs no desaprovechó el ‘regalo’ y puso de nuevo la igualada en el marcador (2-2), que ya sería definitiva.
Pese a que el pase a cuartos de final era una quimera, el Llista nunca dejó de luchar y buscar, al menos, el gol que le diera la victoria. Despedirse ganando era, desde el comienzo, el objetivo real de un equipo que, por méritos, lo mereció. No fue por falta de insistencia, ya que los de Albert Folguera lo intentaron de todas las formas posibles. Incluso la tuvo su hijo Sergi, que al igual que el otro canterano que ha subido al primer equipo para cubrir la marcha del argentino Mauro Giuliani, Sergi Duch, tuvieron su bautizo en el torneo. Andreu Tomàs fue el más insistente. Hasta tres veces disparó con intención el de Tremp para lograr el anhelado 3-2, pero siempre se encontró con un Silva inconmensurable. Al final todo quedó en tablas, un resultado que, pese a finiquitar las opciones europeas del Llista, debe servirle de acicate.
Folguera: “Tenía claro que no quería perder y no hemos perdido” Albert Folguera dijo estar decepcionado por la eliminación europea pero al tiempo contento con la imagen que ayer dieron sus jugadores, valorando lo conseguido las dos últimas campañas. “Ya dije que jugábamos ante un gran equipo y que sería muy complicado. Lástima que hemos estado a punto de ponernos con 2-0 en la primera parte y no lo hemos hecho. Después creo que ellos han tenido mucha suerte con el primer gol y con la falta directa también. Esto pone en valor lo que hemos hecho los dos últimos años, que han sido espectaculares”, dijo el técnico listado, que se va “contento porque el equipo lo veo cada vez mejor, más asentado en la pista, más tranquilo. Lo que tenía claro es que no quería perder y no hemos perdido”, sentenció. Folguera también criticó el formato del torneo, al emparejar a dos favoritos en octavos en lugar de hacer cabezas de serie. “Lo que encuentras en el hockey sobre patines no lo encuentras en ningún otro deporte. Es el mal endémico que tiene este deporte. Es lo que hay”, apuntó.