FÚTBOL COPA DEL REY
Goleada hacia cuartos
El Barça se clasificó ayer para la ronda de cuartos de la Copa del Rey gracias a una plácida victoria ante el Leganés (5-0) con doblete de Leo Messi y goles de Griezmann, Lenglet y Arthur. El partido fue pan comido para un equipo que tuvo el billete en el bolsillo desde el minuto 3. Eso fue lo que duró el Leganés en el Camp Nou, la tarde fue cómoda para los de Setién y un suplicio para su rival. Los de Aguirre están centrados en su pelea por la salvación y no tienen el cuerpo para hazañas coperas y menos, ante este Barça que necesitaba como el comer una victoria contundente que confirmase el estilo de juego de Quique Setién e hiciese pasar la página de Mestalla.
Griezmann se gustó y necesitó muy poco para abrir la cuenta en una acción que dejó al aire las carencias defensivas de los ‘pepineros’. El francés recibió en el corazón del área un balón de Semedo, controló con calidad y batió al Cuéllar con un disparo al palo largo. Cinco minutos después marcó el segundo pero unos centímetros lo anularon tras la revisión del videoarbitraje. A la media hora volvió a rondar la portería visitante, pero en esta ocasión apareció Awaziem para meter la pierna y evitar el segundo. En ataque, el Leganés solo plasmó un par de acciones de Braithwaite que no inquietaron a Ter Stegen. La sensación era de dominio absoluto y contundencia. Para colmo de los madrileños, Lenglet puso el 2-0 con un cabezazo en un córner y todo murió en ese momento. El Leganés tiró la toalla, ya que apenas superó el medio del campo, y el Barça monopolizó el cuero como le gusta a su nuevo entrenador. Acumuló casi 900 pases, un 75% de posesión y sensación de dominio que se confirmó en la segunda mitad.
Messi quiso sumarse a la fiesta a la hora de partido. El argentino regateó como le dio la gana y lanzó a puerta tocando el pie de Tarín. El disparo mordido supuso el 3-0. Ya estaba todo escrito en la eliminatoria, pero quedaba por poner la guinda al pastel y cerrar un encuentro completo pese a contar delante con un rival abatido. Arthur celebró el cuarto gol para el equipo azulgrana después de hacerse dueño de dos rechaces y Leo Messi completó la fiesta local con un mano a mano ante Cuéllar que resolvió a la perfección para el quinto gol azulgrana y su segundo de la tarde. La victoria calma la sed de fichajes en el Barça, hizo olvidar la derrota de Valencia y mantiene al Leganés en su complicada realidad.