El presidente del Lleida Esportiu niega el fraude a Hacienda
El presidente del Lleida Esportiu, Albert Esteve, se ha defendido este viernes en rueda de prensa de las acusaciones de fraude y ha dicho que Hacienda levantó el embargo preventivo al club por impagos de casi un millón de euros hace justamente un año.
Esteve ha reconocido que debe todos los IVA de los convenios que ha ido firmando con las instituciones, de la misma manera que los intereses que los acompañan. En este sentido, el presidente del Lleida ha criticado el Ayuntamiento por la manera de hacer los convenios. Asegura que Hacienda hace años que reclama que son patrocinios y, por lo tanto, reclama un IVA que, según el presidente del Lleida Esportiu, no obstante, está pagando el club.
Esteve, que ha vuelto a reclamar inversiones en el campo y en las diferentes infraestructuras, ha asegurado que el proceso por la querella de la fiscalía será largo, pero que el club se defenderá.
En referencia a los contratos con jugadores y cuerpo técnico, y a las cotizaciones en la Seguridad Social, el presidente ha dicho que, al no haber convenio colectivo del fútbol semi-profesional, la situación es "muy complicada". Además, ha añadido que todo el proceso está impugnado.
La fiscalía de Lleida ha presentado una querella contra el Lleida Esportiu y Albert Esteve por un presunto fraude a Hacienda y a la Seguridad Social por un valor de más de 250.000 euros, y otra contra el presidente por no haber presentado supuestamente la declaración del IRPF en 2014 por un valor superior a 120.000 euros, según adelantó la emisora UA1.
La denuncia contra el club y contra el presidente por supuesto fraude al fisco y a la Seguridad Social se presentó a finales de noviembre y el juez la admitió a trámite el 20 de enero. El presunto fraude, cometido durante el periodo entre los años 2014 y 2019, se detectó durante una inspección de Trabajo y se notificó a la Fiscalía que, al ver indicios de delito, presentó la querella. Según consta en la denuncia, un total de veinte jugadores y tres técnicos no estaban dados de alta en la Seguridad Social, y 67 futbolistas más y un técnico estaban dados de alta con menos horas declaradas que las reales.