OLIMPISMO JUEGOS DE INVIERNO
Aran formará una mesa de apoyo a Barcelona-Pirineus
El Síndic d’Aran, Francés Boya, se reunió ayer con el presidente del Comité Olímpico Español (COE), Alejandro Blanco, para mostrar el apoyo de la Val a la candidatura olímpica de Barcelona-Pirineus 2030. De hecho, el Conselh Generau presentará hoy en el pleno una moción para manifestar este apoyo institucional a la candidatura con la inclusión de Aran como subsede organizadora de las pruebas de nieve y constituirá una Mesa Aranesa con los principales agentes de la Val para su implicación. Con esta moción, el Conselh Generau se pondrá a disposición de los responsables de Barcelona-Pirineus y hará llegar este acuerdo a la diputación de Lleida, el ayuntamiento de Barcelona, la Secretaría General del Deporte, la Generalitat, COE y gobierno español.
“Los Juegos Olímpicos y Paralímpicos de Invierno son de una gran importancia para Aran por el impacto y repercusión que tendrían para el desarrollo económico y social de nuestro territorio”, afirmó Boya, que añadió que “los Juegos de 2030 serán los primeros de una nueva etapa aprobada por el Comité Olímpico Internacional (COI) y Barcelona-Pirineus se ofrece para experimentar este nuevo formato de Juegos capaces de inspirar y transformar la sociedad, especialmente a los jóvenes”. El Síndic también manifestó que “la importancia de estos Juegos reside en que tienen como base fundamental el respeto al medio ambiente, el equilibrio territorial y la lucha contra el despoblamiento”.
El COI dio luz verde a la candidatura de Barcelona-Pirineus e inició una fase de diálogo, dejando claro que el territorio y la propuesta cumplen con su Agenda 2020 en lo que respecta a las condiciones necesarias para convertirse en sede de los Juegos Olímpicos de 2030. Además de Barcelona-Pirineus, existen otras candidaturas interesadas y potentes como Sapporo y Salt Lake City. La ciudad japonesa ya fue sede de los JJOO de Invierno en 1972, mientras que la estadounidense los organizó hace 18 años, en 2002. Las ciudades de Estocolmo y Are, en Suecia, está estudiando presentar una candidatura después de perder la carrera olímpica de 2026, unos Juegos de Invierno que se celebrarán en Milán y Cortina d’Ampezzo.