DEPORTES
Velódromo cada vez peor
El confinamiento está pasando factura en instalaciones que como el velódromo de Lleida se encuentra abandonado a su suerte sin tener aún una solución. El hecho de que los ciclistas usuarios del recinto no puedan ir ahora a entrenar por la forzosa reclusión en casa ha hecho que el deterioro aún sea mayor con excrementos de perro y hasta jeringuillas en la pista. “Esto se hubiera podido evitar con el vallado del recinto tal como estaba previsto el año pasado hasta que se encontrase una solución definitiva”, lamenta el entrenador Ramon Simó.
Simó se refiere a que bajo el anterior gobierno municipal se había presupuestado, tras muchos años de reivindicaciones, acondicionar la pista y vallar el recinto por unos 50.000 euros. Sin embargo, solo se adjudicó en julio el vallado por 12.500 euros. En septiembre hubo una reunión entre el concejal de deportes, Sergio González, acompañado por el arquitecto municipal Carles Sàez; el responsable del gimnasio Ekke, Pep Castarlenas; el director deportivo del Lleida, Jordi Esteve; y el propio, Ramon Simó, tomándose la decisión de replantear el proyecto. “Lo que menos entiendo es que la valla que iba en el velódromo se ha colocado en otra instalación municipal. Somos un deporte que hemos tenido un doble medallista olímpico (Sergi Escobar) y muchos campeones de España y de Catalunya. Hasta hace pocos años, aunque la pista no estaba bien, pudimos organizar tres Campeonatos de Catalunya en categorías alevín e infantil seguidos y en todos obtuvimos podios”, se desespera Ramon Simó.
El concejal Sergio González ha asegurado a este diario en varias ocasiones que “estamos intentando encontrar una solución para el velódromo porque queremos darle a la instalación una mayor actividad”. “Solo palabras y no hechos”, dice Simó.