El parapente de Organyà, sin clientes para poder reabrir

Las actividades de turismo activo y de naturaleza , como los deportes aéreos, entraban ayer en Fase 1 en la región sanitaria de Alt Pirineu y Aran. Es el caso de Organyà, donde hay uno de los mejores lugares para practicar el parapente, sobre todo el acrobático, pero el problema es que no hay clientes para el negocio hasta que no haya movilidad entre provincias. David Guardiola, propietario de la empresa Parapent Organyà, manifestaba ayer que “hace dos meses que no ingresamos. Tenemos la tienda y el taller abiertos, pero vivimos de los turistas con la escuela y las salidas guiadas. La mayoría son gente de Barcelona, de Andorra y del sur de Francia. Si aún no pueden venir, no sirve de nada poder reabrir”.

La temporada alta para esta empresa comienza en Semana Santa y dura hasta finales de septiembre. Suelen pasar de 3.000 a 3.500 visitantes. De las cinco o seis personas que trabajan en temporada alta, ahora solo había dos, el propio Guardiola y un empleado que está en un Erte. “Nos habíamos propuesto hacer clases teóricas online pero si luego no sabemos cuando podrán hacer las prácticas... Nosotros vivimos de lo que ganamos en verano porque los inviernos son muy flojos”, señala David Guardiola.

El leridano Joel Mirón, reponsable del área de ala delta de la Federación Catalana, admite que “no tenemos nada claro aún. Nos llegan notificaciones de diversos organismos y hay un lío entre lo que es deporte particular y empresa. El BOE habla de turismo activo, pero aquí en Catalunya estamos encuadrados en actividades dentro del medio natural”.

La asociación ANETA (Asociación Nacional de Empresas de Turismo Activo) ha hecho llegar al sector una serie de protocolos de seguridad como distancias mínimas, algo que Mirón cree que es contradictorio con respecto a otros sectores. “Un barbero o un dentista si pueden acercarse al cliente y ejercer su labor, evidentemente con mascarilla, guantes y todas las medidas de seguridad e higiene, pero a nosotros no se nos permite los vuelos biplaza”, se lamenta. Tampoco lo entiende David Guardiola. “Si eres profesional federado puedes empezar a entrenar, pero tiene que ser solo porque no podemos hacer biplazas cuando es una actividad al aire libre”, subraya.

En todo caso, el futuro del sector empresarial del deporte aéreo sin motor se augura complicado y puede llevar al cierre. “Lo que no haré es endeudarme”, concluye Guardiola.