DEPORTES
VÍDEO | El Barça amplía su ventaja sobre el Madrid a 5 puntos gracias a su inapelable victoria en Palma
El Barça reforzó ayer su liderato en LaLiga al derrotar 0-4 al Mallorca con goles de Arturo Vidal, Martin Braithwaite, Jordi Alba y Leo Messi, en un partido muy cómodo para los azulgranas ante un conjunto bermellón sin mordiente y en el que solo destacó el japonés Takefusa Kubo. Con su victoria en el Visit Mallorca Estadi el Barça le saca cinco puntos al Real Madrid, a la espera del partido que los madridistas jugarán hoy ante el Eibar.
El balón volvió a rodar en la isla tras la pandemia y tanto el Mallorca como el Barça hicieron lo posible para adaptarse lo mejor posible a la nueva normalidad del fútbol: gradas vacías, rigurosas medidas sanitarias y un partido vital para sus respectivos intereses. El choque entre dos equipos separados por 33 puntos en la tabla tuvo un aire de amistoso de pretemporada, o de un entrenamiento al principio, pero ambas sensaciones fueron efímeras, más que nada, por el valioso botín que estaba en juego.
Volvió a ser el timón, dando la asistencia de gol a Braithwhite y Jordi Alba y cerrando la goleada
El once de Setién, con Braithwaite y Araújo como novedades, quería los tres puntos en juego para mantener el liderato. Al Barça se le vio cómodo en los primeros minutos. Movió el balón de lado a lado del campo como es habitual en su juego, a la espera de un error del rival y favorecido por el excesivo repliegue de los bermellones. El Mallorca se olvidó de lucir las armas que le han conducido de Segunda B a Primera en dos años, o las dejó en el vestuario. Se mostró complaciente y excesivamente temeroso ante un rival que no perdonó desde el primer minuto, cuando Arturo Vidal, en la primera jugada ofensiva, conectó un cabezazo inapelable ante un centro de Jordi Alba medido. El gol dejó algo tocado a los baleares, que solo metían peligro de la mano del japonés Take Kubo, formado en La Masía y con contrato vigente en el Madrid. Incentivado por su pasado azulgrana, presente bermellón y futuro madridista, el asiático pidió la pelota y la jugó con criterio asociándose en el ataque con el colombiano “Cucho” Hernández y el croata Ante Budimir.
Kubo dio un susto a Marc Ter Stegen (min.21) con un disparo cruzado y repitió poco después (min.29) con un lanzamiento de falta, también repelido por el meta alemán. Messi sin su socio favorito, el uruguayo Luis Suárez, que esperaba inicialmente en el banquillo tras regresar a la convocatoria cinco meses después de su intervención, pero con el francés Antoine Griezmann y Braithwhite a su lado, se mostró muy a gusto en un campo que conoce a la perfección. Dio las asistencias en los goles del danés, que se anotaba así su primer gol como azulgrana, y Jordi Alba y firmó el definitivo 0-4 con la derecha y en jugada personal.
En la reanudación, los dos técnicos realizaron cambios: Setién sustituyó a Arturo Vidal, que había visto la tarjeta amarilla, y dio entrada al croata Iván Rakitic. Más tarde Luis Suárez entraría por Griezmann en su vuelta a los campos de fútbol cinco meses después de ser operado de meniscos en su rodilla derecha. Moreno, por su parte, dio entrada a Fran Gámez y Lago Junior que entraron por Joana Sastre y Cucho Hernández. También, en el minuto 56, el ghanés Idrissu Baba sustituyó a Marc Pedraza. Los cambios no alteraron la dinámica del partido, que continuó bajo el dominio azulgarna. El Barça estuvo mucho más cerca de aumentar su ventaja con un remate de Braithwaite, que salvó con la pierna el meta balear en su salida, y otro del canterano Araujo que repelió el poste, que el Mallorca de acortar distancias en el marcador.
El tercer gol, obra de Jordi Alba, también contó con el sello de Messi, quien habilitó al de L’Hospitalet para que marcara a placer ante la salida de Reina. El crack argentino cerró el marcador en el Visit Mallorca con vigésimo gol en LaLiga, aumentando de esta forma su ventaja en la clasificación de máximos goleadores del campeonato, mientras que el Barça, que el martes jugará en casa ante el Leganés, se sitúa cinco puntos por delante de un Madrid que hoy recibe en la ciudad deportiva al Eibar obligado a ganar para no quedar descolgado a las primeras de cambio.