Ante el Nápoles, en casa

El comité ejecutivo de la UEFA decidió ayer que los partidos de vuelta de octavos de final de la Liga de Campeones, que no se disputaron debido al parón por la pandemia de la Covid-19, se jugarán en los estadios previstos al comienzo de la competición, todos ellos a puerta cerrada. De esta forma, el Barça podrá definir su eliminatoria frente al Nápoles en el Camp Nou, tras el 1-1 de la ida, y el Real Madrid deberá viajar a Manchester para cerrar su enfrentamiento con el City tras la derrota por 1-2 en el Bernabéu. A partir de esta ronda, la Champions sí se jugará a partido único en Lisboa. También se jugarán en sus respectivos estadios el Bayern-Chelsea y el Juventus-Olympique de Lyon; mientras que ya hay cuatro equipos clasificados: Atlético, Atalanta, Leipzig y PSG. En relación a la Liga Europa, las eliminatorias Inter de Milán-Getafe y Sevilla-Roma, cuyos partidos de ida también se aplazaron, se jugarán a partido único en Alemania.

Por otra parte, la UEFA, que hoy sortea los cuadros finales de la Liga de Campeones y la Liga Europa, anunció ayer el aplazamiento de la aplicación del VAR en la fase de grupos de la Liga Europa hasta la temporada 21-22, pero confirmó su uso en las eliminatorias de la 20-21 y en la reanudación de los octavos de final de la presente.