El CTT Balaguer asume el ascenso a Superdivisión pero elimina a su filial

El Club Tennis Taula Balaguer volverá a jugar en la Superdivisión un año después de descender y poner fin a una racha de nueve temporadas consecutivas en la máxima categoría femenina de este deporte, que conquistó en la 2015-2016. El cuadro balagariense, que en el momento de cancelarse la Liga por el coronavirus era líder destacado e invicto de su grupo de División de Honor, ha decidido inscribirse pese a los muchos interrogantes que tiene en materia económica. Y es que el Balaguer, como la mayoría de clubes de élite de Lleida, sigue a la espera de conocer las ayudas que recibirán por parte de la Diputación, no solo para la temporada que viene, sino para la que acaba de concluir. “No sabemos ni cuánto ni cuándo cobraremos, si lo hacemos. Gracias a que tenemos un fondo de armario podemos afrontar el ascenso, pero no podremos aguantar más de una temporada”, avisa su vicepresidente, Joan Biscarri.

El club reducirá un poco su presupuesto, que el año pasado rozó los 50.000 euros, ya que ha tenido que eliminar su segundo equipo, que militaba en la Primera Nacional, al perder a tres de sus puntales, que han fichado por el CTT Borges, concretamente Xènia y Neus Roma y Vinyet Solans, que ya era del club de Les Garrigues. El Balaguer Piera Ecoceràmica estará formado este año por la rusa Svetlana Bakhtina, la ucrania Natalya Prosvirnina, la canterana Gemma Lladonosa, la rumana Loredana Dorca, Clàudia Cejas y Laura Garcia, mientras que Anna Biscarri, que seguirá como entrenadora, deja el equipo y jugará con el mixto de Preferente. “He decidido tomármelo con más calma y no tener tanta presión”, afirmó la balagariense.