Llista y Associació, al exilio

El Llista Blava de hockey sobre patines y la Associació Lleidatana de balonmano jugarán en el exilio la próxima temporada al convertirse el pabellón Onze de Setembre en hospital de campaña para atender a corto plazo a pacientes de Covid-19. Los trabajos para adecuar la instalación como ‘Pabellón Salud’, la denominación con la que la conselleria de Salud bautiza estos equipamientos, empezaron ayer y se estima que en unas tres semanas podría estar ya operativo. Aunque no se ha fijado aún el tiempo que el pabellón se utilizará como centro hospitalario, dado que el Arnau de Vilanova empieza a estar saturado de ingresos, se estima que estará operativo hasta marzo o abril del año que viene, según fuentes de la Paeria, si bien estará supeditado a la evolución de la pandemia durante los meses de invierno.

Además del pabellón, la pista exterior, que era utilizada por la base de la Llista para entrenar, también quedará afectada. En ese espacio se ubicará toda la logística, como las plantas refrigeradoras, el tanque de oxígeno y el resto de instalaciones necesarias para dotar de todos los servicios sanitarios a este hospital de campaña.

Por todo ello, el Onze de Setembre no estará operativo para la práctica deportiva durante la próxima temporada, afectando de lleno a tres entidades: Llista Blava, Associació Lleidatana y Lleida Patinatge Artístic, que serán reubicados en otras instalaciones. “La situación es la que es y tenemos que encontrar soluciones. Intentaremos reubicar a las entidades, está clarísimo, encontraremos la forma sí o sí, y haremos todo lo que esté en nuestra mano para seguir dando el servicio”, señalaba ayer Sergio González, concejal de Deportes de la Paeria, que la semana tiene previsto mantener una reunión con los clubes afectados. “Abordaremos con ellos el tema e intentaremos cuadrar horarios y escenarios. Todos los cuadrantes que teníamos de los pabellones se tienen que rehacer porque hay que dar cabida a estos clubes”, añadió.

Aunque todavía no hay nada en firme, la Paeria baraja varias opciones para reubicar a los tres clubes, de los cuales el Llista es claramente el más afectado, ya que todos sus equipos se entrenan y juegan en el pabellón o en la pista anexa. El primer equipo listado, que este año volverá a competir en Europa, podría fijar su base de operaciones en los pabellones de Alpicat o Mollerussa, que también son de parquet, mientras que la base se trasladaría al pabellón de La Bordeta, donde también se instalaría el Lleida PA, que también utiliza el de Magraners.

“Nos adaptaremos a lo que haga falta porque es una situación excepcional, aunque buscaremos la mejor solución posible”, señaló Enric Duch, presidente listado, quien no cree que haya problemas para jugar la Europe Cup. “Supongo que la CERS tendrá en cuenta la situación que vivimos”, advirtió. Su técnico, Albert Folguera, lamentó no poder jugar en su pista, pero entiende que “es un caso de fuerza mayor y habrá que adaptarse”, al tiempo que no se pronunció sobre su posible traslado a Alpicat o Mollerussa. “Lo importante es tener un lugar fijo, me da igual dónde”, apuntó.

En el caso de la Associació, la afectación será menor porque solo afectará a sus dos equipos séniors, los únicos que iban a utilizar este año el Onze de Setembre, ya que los equipos de base están repartidos por otros recintos municipales como el Juanjo Garra, Agnès Gregori y Pardinyes. Este último sería la ubicación preferida para que jugara el primer equipo, que esta temporada regresa a la División de Honor Plata. “Lo que tenemos que hacer es colaborar. Si es en una pista fija, perfecto, pero si tenemos que alternar varias ubicaciones no tendremos ningún problema”, señaló el vicepresidente de la entidad, Guillem Puertas, que apuntó que “tenemos un convenio con el Handbol Alcarràs y otras veces hemos jugado partidos allí. Sería otra opción a valorar”.