Un play off judicializado

El play off exprés que debe definir los cuatro equipos de Segunda B que ascienden a Segunda A arrancó ayer en Málaga, pero lo hizo marcado por las demandas presentadas por el Lleida Esportiu que, según anunció en su día el propio club, solicitó la medida cautelarísima pidiendo la paralización del mismo. Así, un notario de Málaga, escenario del play off exprés, hizo llegar un requerimiento notarial a los responsables de la Federación Española de Fútbol (RFEF) en los partidos Ibiza-Cornellà y Castellón-Logroñés, siguiendo la instrucción de la cautelar que ha pedido el Lleida Esportiu al juzgado contencioso administrativo de la Audiencia Nacional.

El notario también entregó una notificación en la que advertía a los responsables federativos de que los partidos pueden anularse en un futuro, a la espera de la decisión del juez, que aún tiene que decidir si concede la cautelar demandada por el Lleida, lo que paralizaría la competición, aunque fuera de forma retroactiva.

El notario entregó un documento en el que advierte de que los partidos pueden anularse

Ayer la instrucción del contencioso-administrativo de la Audiencia Nacional comunicó al Lleida, como parte demandante, que si no se resolvía la cautelar antes de las 20.00, hora del primer partido previsto, se levantarían requerimientos notariales, como así fue.

La causa estaría repartida en dos juzgados. Uno lleva el tema de la cautelarísima, que fue el que comunicó el viernes al club que si falla después del inicio del play off su decisión tendrá caracter retroactivo y otro lleva la instrucción de las diferentes demandas del Lleida, por si la demanda acaba llegando a juicio. Este fue el que comunicó ayer que, si no llegaba la cautelar, se levantarían las referidas actas notariales. El Lleida entiende que el play off no debe jugarse ya que la modificación de competición no tendría base legal.